Escuchando: Animal Nitrate (Suede)
Vaya racha. He ido esta tarde a buscar las fotos del segundo carrete que llevé a Roma. Pero no, mala suerte. Se ha trabado en la máquina y ha acabado convertido en esta tira negra, lo sentimos. Pero te damos un revelado gratis. Y otro carrete.
En fin. Eran fotos (lomografías) tiradas en Roma, en el Vaticano, en su cúpula, y también unas cuantas pruebas para un concurso. Tampoco es que sea una tragedia, pero jode. Me lo he tomado con filosofía, me agota usar mi poca mala leche.
Igual que esta mañana, cuando he ido a cancelar mi cuenta en Caca Cantabria. Que no he podido: les hace falta la libreta. Qué fijación tienen en esta Caja del siglo XXI por las putas libretas, ese invento que hace varios lustros que me dejó de parecer útil. No sé ni dónde la tengo, sin actualizar desde hace años. Para ellos debe de ser vital. Para que les cuadre el ábaco, supongo.
En fin, a lo que iba. Que en la tienda (Zoom de la Plaza Numancia) se han cargado mis fotos. Y como mi vida es muy surrealista, y mucho más divertida que las suyas (porque se ríe de mí, digo) cuando salí de la tienda me fui corriendo a hacer fotos a una conferencia, de la Semana Cultural de Medicina. La conferencia se llamaba así: Lo que no sale en la foto. Palabrita. ¿Es o no es gracioso?
En concreto, el título era más largo: Lo que no sale en la foto: sobre identidad, enfermedad y representación, a cargo del profesor de Medicina Fernando Salmón. Mi intención era ir, tirar las fotos, e irme, pero al final me quedé a toda la charla. Y es que el tema me resultó fascinante: la fotografía como herramienta terapéutica. Desde las distintas formas en las que se ha retratado a algunos enfermos (SIDA, cáncer de mama) hasta experimentos fotográficos destinados a que los enfermos intenten expresar su dolor.
Después de la charla había un par de conciertos. Uno no me ha gustado mucho, y en el otro el batería había tenido un percance a última hora, y no ha podido tocar. El resultado ha sido un concierto con momentos muy bonitos, y otros muy caóticos. Pero entre amigos.
Y ahora… ahora hay que irse a la cama, hoy prontito. Mañana quiero llegar mucho antes a trabajar. ¿Para qué? Para salir antes. Si me da tiempo, iré a hacerle algunas fotos al alcalde.
Seguiremos informando.