Invariablemente

Escuchando: Prefiero el trapecio (Manolo García)

Con la ausencia, por fin, más o menos, de lluvia, he podido reanudar mi costumbre de paseo a casa desde el trabajo…

Y lo que tiene pasear es que te encuentras con gente, con situaciones, con escenas curiosas. Incluso aquí, sí.

Iba yo cuatro mundos más lejos, escuchando música, cuando he visto a un hombre en la acera, con dos películas en la mano, mirando con cara de asombro al local que tenía delante. Un videoclub. O lo que fue uno hasta la semana pasada, porque al llegar a su altura comprobé que lo que miraba era un local vacío, con las paredes desnudas, sin estanterías, con algún papel en el suelo y poco más; bueno sí, un cartel de «Se alquila». Pero el local, que películas ya no.

No sé por qué, pero me dieron ganas de darle unas palmaditas en el hombro al hombre ese… y decirle: «sé cómo te sientes, de verdad que lo sé… consuélate, tú al menos te has llevado un par de películas de recuerdo…«

Como el lindo gatito fracasamos invariablemente
para diversión del personal
que nos mira de reojo.
Y como el Coyote, nunca llegamos a la hora,
ni al lugar, ni en el momento preciso.

Y eso que a mí nunca me han cerrado un videoclub…

Seguiremos divagando…

De entre todos los weblogs del mundo…

Escuchando: As time goes by (Herman Hupfeld)

Imprescindible comprar hoy El País… de regalo: una edición en DVD de Casablanca, con libro de 60 páginas incluído.

Una oportunidad fantástica para hacerse con una película que no puede faltar en cualquier filmoteca. Los que no la hayáis visto, porque ya va siendo hora; existen tantos tópicos sobre esta película que la primera vez que se ve, todo suena familiar…

Y los que ya la hemos visto, porque siempre está bien tenerla a mano, a veces apetece volver a pasearse por sus diálogos mordaces, por sus escenas míticas…

Las despedidas no siempre serán en aeropuertos, no siempre estará lloviendo… pero siempre intentaremos poner cara de duro, y fingir que no pasa nada…

A mí nunca me sale. Y ni siquiera suele haber ningún París…

Seguiremos informando.

PD: Y no. Lo de «Tócala otra vez, Sam», no se dice nunca en la peícula. Mito.

Beppo

Escuchando: She has no time (Keane)

Para mí, Michael Ende siempre fue el escritor de Momo. Sí, vale, también había escrito La Historia Interminable, pero para mí era el autor de Momo. Fue el libro que más recuerdo de mi infancia, de haberlo leído un montón de veces.

La Historia Interminable, en cambio, no la leí hasta bastante más tarde. Pese al título, me la leí bastante rápido. Pero me voy por las ramas, estaba hablando de Momo

La verdad es que no sé qué habrá sido de aquel libro, de páginas amarillentas… hoy ya se me han olvidado la mayoría de los detalles de la historia, pero me han quedado algunos…

Me han quedado los hombres grises, que se fumaban el tiempo del personal. Ojalá hayan acabdo todos con un cancer intemporal de pulmón. A veces pienso que debo de tener añgún hombre gris cerca, porque llevo una temporada que se me escapa el tiempo; las semanas pasan volando, pero pasan sin pena ni gloria; me gustaría tener más tiempo para aprovecharlo, pero cuando lo tengo no sé lo que hago con él…

Quizás tenga que encontrar a mi Doctor Hora, ir a su casa; allí me sentiría como en la mía, siempre con relojes sonando por todas partes…

Creo que lo que más recuerdo de ese libro es una tontería, un detalle de nada. Beppo, el barrendero. Contaba lo larga que puede parecer una calle cuando hay que barrerla enterita; el truco está en no fijarse en toda la calle, sino en la baldosa que tenemos delante; y luego, pasar a la siguiente; después otra más; y cuando nos queramos dar cuenta, estaremos al cabo de la calle.

Gran tipo, este Beppo.

En cualquier caso, si yo me encuentro con una tortuga por la calle, se para delante de mí, y veo que escribe un mensaje en su caparazón, no buscaré ningún hombre gris: el que se habrá fumado algo habré sido yo.

Seguiremos informando.

Cuento sin principio #5

Escuchando: Hello, Goodbye (The Beatles)

Los idiomas son su vía de escape a la rutina. Muchas veces se sorprende con pensamientos ágiles, prácticos, directos, en inglés; otras, se deja llevar por la musicalidad de un francés más sensual en unos labios que en un papel; en los momentos de aburrimiento construye palabras en alemán, con piezas de Lego impronunciables formadas de letras.

Pero ahora, reconociendo de nuevo su cara entre la multitud, es una de esas ocasiones en las que sus básicos conocimientos de italiano llaman a la puerta. Ocasiones en las que cada nuevo encuentro es una nueva despedida…

Ciao.

27 de enero de 2004

Escuchando: California (all the way) (Luna)

Hace un año llegaba a mi casa un paquete de Apple con mi iPod. Y desde entonces no me he separado de él. Bueno, vale, salvo dejármelo olvidado en otros países y tal.

En este año, la música que ha ido almacenando ha cambiado bastante, porque ha sido un año de descubrimientos, de experimentos musicales.

Y después de un año…

+ Tengo actualmente 2851 canciones; 13,28 Gbytes; o 9,7 días de música ininterrumpida; 207 artistas, canciones de 297 álbumes.

+ Por géneros (aunque odio las etiquetas)… 1081 canciones de música independiente, 13 de bandas sonoras, una de blues, 9 de chill-out, 97 de electrónica, 140 de jazz, 13 de latino (¿latino? ah, coño, sí, Tribalistas), 157 de jevi metal, una de new age, 219 de pop, 576 de rock progresivo, y 544 de rock, a secas. Aunque bueno, desconfío de la exactitud con la que tengo catalogada la música por géneros…

+ La primera que llegó, y se mantiene dentro, es Witch Hunt, de Arena. La última canción en llegar ha sido L’amour Ne Dure Pas Toujours, de la canadiense Feist.

+ La canción más corta es la Intro al disco Almost Happy, de K’s Choice, con 21 segundos. La más larga, una épica, All of the above, de SMPTe, con sus 30:58… (y no le sobra ni un segundo, oiga)

+ Hay 68 canciones que aún no he escuchado nunca; aunque en realidad son 54, porque 14 pertenecen a un disco ya escuchado que he recomprimido (Autour de Lucie)

+ 1956 canciones las tengo sin puntuar (en un iPod, se pueden dar estrellitas, de una a cinco, a cada canción). Da mucha pereza ir dando puntuación a cada tema…

+ 360 canciones tienen 5 estrellas. Lo mejor de lo mejor. O lo mejor de lo puntuado, al menos. La última en obtener el galardón ha sido Come Back To What You Know, de Embrace.

+ Y el galardón entre los galardones. La canción más escuchada en este año… en realidad son dos, ambas escuchadas 16 veces, y ambas con la máxima puntuación: Astronauta 7, y El Hombre Tranquilo; las dos de Pequeño Pecker. El resto de canciones de ese disco encabeza la lista de lo más escuchado, junto a joyas como Inside, de Bang Gang o 6 Underground de Sneaker Pimps, o temas de K’s Choice y Manolo García. En la variedad está el gusto.

Pues eso. Seguiremos escuchando.

Días grises, lugares comunes

Escuchando: Mr. Freeze (K’s Choice)

Al mediodía, después de trabajar, aprovechando que sólo hacía un frío de tres pares de cojones -pero no llovía-, he estado dando un paseo con la cámara. Y disfrutando del aire puro; gélido, pero puro. Trabajar cerca de donde están tirando una pared es lo que tiene, que respirar polvillo no es muy saludable.

Cuando toda España está pintada de blanco, nosotros vamos a contracorriente y nos quedamos con nuestros grises; que no está mal, la vida no es ni blanca ni negra, sino con mil matices, como los cielos de Santander…

Seguiremos informando…