Me gustan las películas tristes. Es otra de mis rarezas. Los finales felices siempre me han precido forzados, poco reales. Obligar a una historia a que acabe bien no es la mejor manera de retratar la vida…

Y a mi me gustan las películas que la retratan…

Acabo de ver una película que me ha emocionado. Una película triste, Muy triste. Siempre he querido verla. Sólo por el título, sabía que no iba a ser una película convencional…

Mi vida sin mí. Una película triste, con un argumento triste, que deja pasar los minutos a base de ternura, de sueños por cumplir, de sueños imposibles, de mentiras, de secretos, de emociones….

Envuélvase con una deliciosa banda sonora, retrátase con una maravillosa fotografía e interprétese por una (para mi) desconocida actriz que literalmente se come la película cada vez que mira a la cámara, y se obtiene una película difícil de olvidar… Eso sí, por favor… vedla en versión original, en inglés… si no, os quedaréis a medias…

Acompañando a la joven protagonista, Sarah Polley, aparece María de Medeiros en un papel un tanto estrafalario, mi adorada Leonor Watling (el cd de Marlango sigue dando vueltas en mi bandeja), que aparece poco, pero bien, y Deborah Harris…

Ésta última seguro que la mayoría no sabéis quién es… es la cantante del grupo Blondie (seguro que os suena más de una canción….) Sólo he visto a esta mujer en dos películas, una es esta. La otra, una de esas películas intrascendentes que no he podido olvidar, Heavy, con Evan Dando (el que fuera cantante de los Lemonheads) y, sobre todo, con Liv Tyler…. Deborah Harry sabe escoger bien sus papeles, por lo que veo…

Así que nada, Mi vida sin mí se suma a mi lista de películas tristes preferidas…. junto a Bailar en la oscuridad y La habitación del hijo, por ejemplo…

Nadie dijo nunca que yo fuese normal…

Ayer me encontré con mi hermana por la calle. En concreto, estaba delante de mi, gesticulando para llamar mi atención. Cuando yo digo que voy por la calle atontao, es por algo… además, si en general voy más concentrao en la música que escucho que en lo que me rodea, ayer además iba pensando en algunas de las cosas que me rondan la cabeza estos días…

Por ejemplo, Ítaca, en situación comatosa desde hace algunas semanas, a causa de una inminente diáspora de personal… Cuando ya todo parecía apuntar a la eutanasia empresarial como única solución, ayer volvió a surgir la esperanza… ¿y si….? ¿y si…? En unos días, más detalles….

Hoy he vuelto a casa al mediodía dando un paseo. La lluvia y yo nos dimos la misma prisa en llegar (o sea, ninguna…) Yo además iba escuchando un disco que, aunque no es el mejor de la discografía de Dire Straits, es uno de los discos con la producción más cuidada que he escuchado… Y tiene auténticas joyas…

and you still refuse to be traced seems to me such a waste and every victory has a taste that’s bittersweet and it’s your face what I’m looking for… on every street

Seguiremos informando…

PD: Ayer decidí que no me iba a la cama sin terminar un flash que irá en mi nueva página. A las dos de la mañana, pero lo acabé… cada vez queda menos para que la publique… ¿hoy? ¿mañana? Ya puede ser en cualquier momento….

Nunca he negado que tengo formas curiosas de pasar el tiempo. Hoy he dedicado la noche, por ejemplo, a repasar mis más de 5000 fotos digitales (y subiendo) para quedarme con lo mejó de lo mejó, y prepararlas para una nueva sección de mi web… web que espero poder publicar a lo largo de esta semana, al final hay un par de detalles que me están llevando más tiempo de lo que pensaba…

Espero que el resultado merezca la pena…

Seguiremos informando..

Esta mañana he elegido ir escuchando el Awake de Dream Theater en el bus, un buen disco para despertar….

Cuando llegaba a trabajar, estaba sonando mi momento preferido de ese disco: el final de la sexta canción y el principio de la séptima.

Dream Theater no es el sentimiento de una canción lentita como The Silent Man. No es la potencia apenas controlada de temas como The Mirror. Dream Theater es el contraste de oír el final de la primera y el principio de la segunda… Brutal.

Reflections of reality Are slowly coming into view

Esta tarde tenía intención de pasarme por la Filmoteca, más por hacer algo que por la película… pero al final me ha vencido la pereza y las ganas de volver a ver una peli que ha caído en dvd este fin de semana… Ghost World. Basada en un cómic, es una película original, mordaz, con una estética de lo más particular… con una protagonista difícil de olvidar (por lo peculiar), y con el genial Steve Buscemi… Imprescindible para cualquier mente cinematográficamente inquieta… Esta revisión me ha servido para pillar algún chiste que se me había escapado la primera vez (en la filmo), para fijarme en que sale un portátil Apple, y para descubrir que hay un gag final después de los créditos….

Aunque mi escena preferida es…

– Hi… what’s your name?
– Norman.
– Are you waiting for a bus?
– Yes.
– I hate to tell you this, but… they cancelled this bus line two years ago. There are no more buses on the street…
– You don’t know what you’re talking about….

PD: Y sí… la de la izquierda es una jovencísima Scarlett Johansson. Cómo no. Yo estoy enamorado de ella.

A modo de curiosidad… mi kit de supervivencia:

1. Auriculares Apple, tuneados con los capuchones de unos Sony. Son los que uso cuando me quiero aislar del mundanal ruido (por la calle, por ejemplo)… lo consiguen…

2. Auriculares Apple estándar. Para cuando no me quiero aislar del todo…

3. Mis llaves, claro. Llavero de recuerdo del Museo del Prado, y mini-linterna con luz azul para el móvil, recuerdo de la tienda SonyEricsson de Bruselas…

4. Mi iPod 🙂

5. Mi Palm. Sin ella se me olvida todo. Comprobado. Félix, el año que viene te felicito el cumpleaños, que ya lo tengo apuntao…

6. Mi móvil. Con cámara para las emergencias.

Sí. Soy un geek.

Ayer me senté en una mesa dedicada a Ella. A Ella Fitzgerald…

Cada vez me gusta más el Doménico para comenzar la noche… ayer había concierto (un dúo guitarra + percusión de lo más curioso, estaba muy bien), y después dejaron un buen rato puesto el dvd de vídeos de The Police. Siempre salgo de allí habiendo escuhado alguna joyita…

El resto de la noche fue un poco lo de siempre. Agradable. Nada especialmente destacable. Un sábado más…

Eso sí, se habló de planes para el jueves. Esos dos personajes inclasificables llamados Raúl y Jairo, planean hacer/perpetrar un concierto/fiesta el próximo jueves (santo), en el Bolillón (La Albericia), a eso de las nueve de la noche. Cerveza gratis.

Si ya el concierto del pasado jueves en el Woodstock fue divertido (y con la nota «seria» de la noche a cargo de la voz de Phil Grijuela), lo de esta semana promete ser de órdago… Y no lo digo por lo de la cerveza… lo digo porque lo están preparando (y lo sé de muy buena mano) en plan sabemos cuándo empezaremos pero no cuándo terminaremos… Carlos, teclista de Salamandra, se acaba de pasar por mi casa a buscar un cd para aprenderse una (genial) canción, y cantarla con ellos en el concierto… en concreto, me ha dicho que le han liado para cantar cuatro temas… Y por lo que sé, habrá muchas colaboraciones de este tipo…

Así que ya lo sabéis: lo del jueves promete. Y mucho.

No es el úncio concierto interesante (al menos para mí) que se avecina esta semana… El viernes y sábado se celebra en Penagos el II Festival Catiusca Rock. No tengo la lista completa de grupos que tocarán, pero serán lo mejor de lo mejor del panorama rockero/metalero cántabro… Eso sí, mi interés se centrará sobre todo en el último concierto del sábado… después de muchos meses, después de reorganizarse en cuarteto, de preparar nuevos temas… vuelven a la carga… Salamandra.

Llevaré la cámara a ambos conciertos. Seguiremos informando.

Litio. Li. Número atómico 3. Metal de color blanco de plata, tan poco denso que flota sobre el agua, la nafta y el petróleo; se funde a 180 grados y, combinado con el oxígeno, forma la litina. Y gracias a las baterías que se hacen con él, me puedo pasar tardes como la de hoy… Gibson quemaba cromo, yo quemo Litio, me he cogido el móvil, la cámara y el iPod y me he puesto a callejear, a tirar fotos y a hacer experimentos con la cámara… y digo callejear, porque he intentado evitar lo que me pasa siempre: que acabo sacando fotos siempre en el mismo sitio (ya hay una farola que es mi farola)

Así que nada… he estado sacando fotos a rincones poco llamativos, a calles sin interés, a detalles tontos. La gente flipaba, claro. No por mi pose de esforzada concentración, apretando botones y manteniendo el pulso con afectada profesionalidad. No. Flipaba porque si seguía la línea de lo que apuntaba mi cámara, generalmente no había nada de interés… ay, pobres, acostumbrados a mirar sólo con los ojos… Eso sí, el día se ha portado.. no sólo porque ha hecho una tarde fantástica, sino porque no estaba completamente despejado… odio los cielos azules perfectos para sacar fotos… I’m only happy when it rains, I’m only happy when it’s complicated…

Queda demostrado que en este pueblo es imposible salir a la calle y perderse sin encontrar a alguien conocido… Y no es que yo vaya de autista o antipático por la vida (que también), pero tener que quitarse los auriculares y dejar de escuchar Love is blindness para saludar a alguien, por muy majo que sea, es un sacrilegio…

Hoy he mandado un mensaje con una felicitación, y otro con un saludo. Ha sido más agradecida la receptora del primero.

Hoy he visto una película: Días de fútbol. Me ha decepcionado bastante. Tiene puntos, pero es un pobre intento de repetir el éxito de El Otro Lado de la Cama. Natalia Verbeke sigue estando muy buena. Yo estoy enamorado de ella.

Hoy el cd de Marlango le ha sacado miles de vueltas de ventaja al resto de mis discos. No sé cuantas veces lo he escuchado (y sigo). Leonor Watling canta muy bien. Yo estoy enamorado de ella.

Hoy me he enterado de que una amiga está pasando por unos momentos muy duros. La he llamado y no me ha cogido el teléfono. No he vuelto a insistir, porque de todas formas en estos casos nunca sé qué decir. Ánimo, lo siento, son cosas que pasan, no somos nadie… todo frases hechas. La vida es muy perra, a veces. La muerte, más.

Viernes por la tarde: habitual día para el descanso y la tranquilidad… dentro de lo que cabe, porque también suele ser la tarde que puedo pasar más rato con mi sobrino… está hecho un auténtico demonio, y uno no sabe si comérselo a besos… o comérselo a secas…

Pero aunque se porte fatal, y se quede sin ver Toy Story o Ice Age por malo, me encanta sacarle fotos…

Esta tarde he estado dando una vuelta por el centro, haciendo tiempo hasta que un compañero me acercase una cosa que me había dejado olvidada en la Universidad por la mañana (nota mental: no volver a dejar dentro del dvd del ordenador de la uni el dvd que tengo que devolver al videoclub)

Mientras esperaba, me he entretenido viendo escaparates, y en uno de ellos estaba Ella. Desde que supe que existía, siempre había tenido la secreta esperanza de que al verla en vivo fuera fea. O no me gustase. O me pareciese demasiado grande. Pero, desgracidamente, no. Es preciosa. Es la cámara digital réflex que ha sacado Canon a un precio asequible… pero aún así, lo bueno se paga (a 1250 euros la unidad, en este caso concreto…)

Pena que con la incertidumbre sociolaboral en la que me hallo, vaya a tener que dejar por una temporada mis caprichos…. al final me tuve que alejar de la tienda, porque… porque… porque no podía dejar de mirarla con esta cara:

Pero bueno, seamos sensatos… primero tendré que acabar de exprimir al 100% mi actual cámara, y para eso aún me queda… creo que mañana puede ser un día perfecto para perder la tarde fotografiando tonterías… me apetece mucho….

Nada más por el momento… un fin de semana más….con una llamada a medio hacer, un libro a medio terminar, muchas películas por ver, una página por publicar, mil discos por escuchar, alguna cerveza por beber, y muchas fotos por hacer…. seguiremos informando….

– Pues, ¿a qué te dedicas?

Ella se quedó pensando. Luego dijo:

– Al western.
– ¿Al western?

No estaba muy segura de recordar lo que eran.

– Sí, western.

Tenía que ser algo relacionado con las pistolas.

– ¿Y cuántos haces?
– Uno.
– ¿Es bonito?
– A mí me gusta.
– ¿Me lo enseñas?

Fue exactamente así como empezó esta historia. Por casualidad.

(City, por Alessandro Baricco)