Puedo ser pequeño, pero tengo un castillo

Escuchando: Mirando al cielo (Fito y Fitipaldis)

Si te lo imaginas, ya puedes entrar…

Mensaje para un lector de esta página: ya tengo tus entradas. Misión cumplida. Están a salvo, las tengo en el pantalón que he echado a la lavad… oooops…

Que nooo. Confía en mí. Nos vemos el 16 en el Palacio de Deportes, y así de paso lo conozco por dentro, después de haberlo visto nacer lentamente, desde mi ventana en la Universidad.

El concierto de Fito promete, la verdad es que me apetece mucho. Y por lo que me ha dicho el amiguete que trabaja en Tipo, ya han vendido un montón de entradas, así que la cosa va a estar llenita. En Bilbao reunió a 60,000 almas, que se dice pronto.

Además, viene con telonera. una tal Mürfila, a la que no conozco de nada, pero al entrar en su página, me ha sonado una canción suya (Loko, sic). Echar un vistazo a algunas de sus letras ha sido como autopegarse un puñetazo en el estómago («qué lo que te pasa», «I don’t know what to do with my afraid»), aunque otras tienen mejor pinta… En cualquier caso, es rara, como telonera puede ser visualmente interesante…

Seguiremos informando.

PD: Y esta noche, de cenita…

PD #2: Cuando salía de comprar las entradas, me enocntré con otro amigo que entraba, también a comprar entradas, pero de otro concierto y con más antelación. 8 de Enero, R.E.M. en Madrid. Mmmmm… ¿alguien se apunta?

Believe it or not

Escuchando: Believe it or not (Joey Scarbury)

Ayer mientras cenaba, la tele me acompañaba con imágenes de la última matanza en Bagdad, esta vez han sido una treintena larga de niños. Y yo me preguntaba si realmente ahora la vida en Irak es mejor que el año pasado. Para la gente de a pie, para los currantes, para los niños. Lo dudo.

Minutos después el telediario saltaba a la noticia del primer debate entre Bush y Kerry. A Kerry tampoco es que lo tenga especial simpatía, pero pasa como en España. Cuando uno de los candidatos es sencillamente inaceptable, sólo se puede aspirar a votar al menos malo.

Y pasé a ver la cara de profunda estupidez de Bush en pantalla, sus titubeos, sus confusiones entre Bin Laden y Hussein (esto lo hicieron los dos candidatos, qué mas da, sólo se trata del malo de turno, el nombre es lo de menos…) En fin. Todo eso me hizo pensar que había elegido el día perfecto para acercarme a la Filomoteca a ver Fahrenheit 9/11, el documental de Michael Moore.

Y es que esta semana, por problemas de distribución, han sustituido de la programación la peli china Hero (que he visto en DVD, muy recomendable…) por el incendiario documental de Moore. Como me imaginaba que el tema de entradas iba a estar complicado, me pasé cuando salí de trabajar a por la mía, tres horitas antes…

E hice bien, cuando llegué al cine 20 minutos antes de la peli, ya estaba colgado el cartel de no hay localidades.

Michael Moore y sus documentales despiertan amor u odio, sin términos medios. Es lógico. Si hablamos de Fahrenheit 9/11, hay que tener claro lo que se va a ver: una película anti-Bush, ariete de la campaña que este cineasta mantiene contra su presidente. Por lo tanto, que nadie se espere datos neutrales y presentados objetivamente. Moore es tendencioso, y usa todos los trucos a su alcance para denunciar, acusar y señalar con el dedo. Y en eso es un genio.

Por otro lado, en esta ocasión, Moore se ha rodeado de un ejército de abogados y documentalistas para blindarse y que nadie pueda reprocharle nada a lo expuesto en su película. Hasta la fecha, y que yo sepa, nadie ha conseguido demostrar que lo que cuenta Fahrenheit 9/11 sea falso. Puede estar sacado de contexto, puede estar exagerado, pero es lo que hay.

Y lo que hay es digno de verse. Por muy defensor de la guerra, por muy pro-Bush que se sea, me cuesta imaginar que tras ver este documental uno no sienta al menos cierto desasosiego, cierta inguietud… cierta tristeza por el mundo que nos ha tocado vivir.

Yo fui con ganas de reirme de Bush, y lo hice. Aunque haya veces que se trate de reírse por no llorar, claro.

Un detalle: me hizo ilusión encontrarme en la banda sonora la canción que acompaña a estas líenas. Me trajo recuerdos de infancia, me encantaba aquella serie…

Seguiremos informando.

PD: Pequeña tragedia de la noche de ayer… después de salir del cine, cuando me iba a encajar el iPod en las orejas, descubrí que se me acababa de perder uno de los capuchones de silicona de mis auriculares tuneados. Y en una cuesta y de noche, a saber dónde había ido a parar. Sic. Menos mal que tengo otros de reserva, pero son más pequeños, y más incómodos. A ver si me hago de un repuesto, aunque me imagino que me salga el gramo de silicona más caro que a la Pamela Anderson media teta.

Mehr Kameras…

Escuchando: We never change (Coldplay)

En la feria dedicada a la fotografía Photokina, que se está celebrando estos días en Colonia, se han presentado nuevos productos, algunos de ellos muy interesantes…

Y es que el segmento de las SLR (réflex) digitales de consumo es muy jugoso, y hasta ahora sólo Canon y Nikon (por ese orden) se habían metido ahí…

Hasta ahora. Porque Olympus y Pentax acaban de presentar sus propuestas. Olympys E-300 y Pentax *ist DS. Cámaras que se apartan un poco de la estética habitual de una réflex, pero que por prestaciones y precio prometen. Y es que parece que se situarán en la línea de los 1000 euros. A ver si es verdad. Y a ver si Canon y Nikon contraatacan con bajada de precios y/o nuevos modelos.

La cosa se anima…

Seguiremos informando…

Fuente: www.quesabesde.com

Synedria

Escuchando: She’s gone (Eric Clapton)

Algunas cosas que se me han quedado en el tintero de estos últimos días, que he tenido la cabeza en otra parte…

Me vuelvo a ir de viaje. Vuelvo a volar a Grecia. Definitivamente, a Mykonos, me voy el miércoles de la semana que viene, hasta el domingo. Siento más pereza que ilusión (sí, ya sé que es difícil de entender y que es pa’ matarme…) pero bueno, no me queda otra, tengo que ir. Tengo una reunión que se promete aburrida y larga (dos días completitos) porque ya no se puede dejar nada para más adelante, el proyecto se acaba y hay que salvarlo como buenamente podamos…

Yo tendré libre el sábado para explorar un poco aquello. Mal se me tiene que dar para no volver con una buena foto. Aunque sólo sea desde la terraza del hotel, que si se parece en algo a las imágenes que he visto por Internet, no me explico cómo sólo vale los 55 euros por noche que me (o sea, a la universidad) cuesta la habitación. Será que es temporada baja y hay menos ambiente (y sí, ésto, siendo esa isla en concreto, es un doble sentido)

En fin. Un día de estos a ver si me animo y agarro algo para poder subirme y llegar hasta la estantería de arriba del armario de mi habitación. Ahí tengo la guía de Atenas y las islas, tendré que echar un vistazo para situarme y organizarme…

Más cosas… ayer mi hermana aprobó el práctico y sacó el carnet de conducir. Sí, soy el que queda de mi familia por sacarse el carnet. Pero si ya estáis apuntando con el ratón al enlace de los comentarios para echármelo en cara, que sepáis que llueve sobre mojado: ya me lo ha dicho todo el mundo.

Un día de estos me pongo. Palabrita. El día menos pensado.

Y poco más interesante me ha pasado estos días… me han pasado cosas poco interesantes, como por ejemplo ver cuál es exactamente mi nuevo sueldo. Y no me ha dejado de muy buen humor precisamente. Entre lo que se queda la Universidad y lo que se queda Hacienda, yo me quedo con las sobras, con el 50% de lo que firmé, que ya era una mierda. A este paso me voy a comprar la Nikon cuando no tenga pulso para sujetarla…

¿Tendré que pensar en buscar un tercer empleo? Total, con mi insana costumbre de dormir cinco horas, tiempo tengo…

Seguiremos informando…

PD: Me he puesto el dvd de Eric Clapton, el concierto que mejor suena en mi cine en casa, hacía mucho que no lo escuchaba, y como siempre, me encanta, es genial, no existe el mundo fuera de las paredes de mi habitación. A pesar de los títulos de algunas canciones… y a pesar de que se pierda la sincronización de la imagen al final de Layla, aunque nadie me crea…

¿Una rosa?

Escuchando: Around the Sun (REM)

He tardado unos días más de los previstos, pero ya están en mi página las fotos de este fin de semana pasado, en la Verbena de la Rosa de Ampuero…

Y por supuesto, con contraseña, la de siempre. Ya lo siento por los que no se la sepan, pero tenemos una reputación que guardar…

Seguiremos informando…

Sick & tired

Escuchando: Sick & tired (The Cardigans)

Ayer estuve todo el día con el estómago hecho polvo, apenas comí y encima me sentó mal. Cuando volvía por la noche de trabajar, pensaba que nunca iba a aparecer mi calle, iba andando como el barrendero de Momo, baldosa a baldosa… lo único que me apetecía ere meterme en mi camita…

Que fue lo que hice.

Y ahí sigo.

Espero estar recuperado del todo para esta tarde.

Seguiremos informando.

Operator, number, please:it’s been so many years

Escuchando: Paranoid Android (Radiohead)

No tengo por costumbre estresarme, y hoy no lo he hecho, pero habría sido el día perfecto. No he tenido tiempo ni de asomarme a esta página a escribir unas líneas, ha sido un día en el que me he peleado con código ajeno, en el que he tenido que interpretar lenguajes, encontrar errores, hacer pruebas y más pruebas. Hasta los viajes en autobús los he aprovechado con llamadas de negocios… Eso sí, tenemos un nuevo cliente. Ole.

El caso es que cuando he llegado a casa lo que menos me apatecía era volver a mirar una pantalla de ordenador. Aunque lo he hecho, brevemente. Suficiente.

Después de cenar, he atado algunos acabos que no sé si son del mismo color, o no. Es igual. De repente he sentido un poco de frío, aunque haga sol, el verano se ha acabado, y a veces me acuerdo más que otras.

Sabia lo que me apetecía, y era hablar con alguien. Pero no una charla cualquiera, quería tener una conversación sin motivo, sin razón, sin explicaciones. Porque hoy había escuchado canciones de Tom Waits. Porque hoy es hoy, como la caja roja.

Y he acabado marcando un número que creía borrado, una combinación de cifras que hacía meses que no intentaba, aunque últimamente hubiese tenido alguna recaída. Ha sido curioso, porque ni yo esperaba encontrar a nadie al otro lado, ni el otro lado esperaba encontrarme a mí en éste. De eso estoy seguro.

Costó arrancar una conversación en la que yo no sabía para qué había llamado. Y ha sido una conversación un poco triste, porque yo lo estaba (sólo un poco), y también porque los dos sabíamos que era la primera vez que hablábamos en mucho tiempo, y es casi seguro que sea la última en otro tanto.

Y ha sido una conversación un poco triste, porque sin pretenderlo, sin palabras, he echado en cara. Y sin pedirlo, sin necesitarlo, he escuchado excusas, explicaciones. Que me da igual que sean ciertas o piadosas. Porque me las creo. Soy la persona más fácil de engañar de todo el mundo. Para hacerlo, sólo hace falta contarme una mentira. Yo siempre colaboraré creyéndomela. Estoy cansado, ya estoy mayor para preocuparme por si la gente es sincera. Todo el mundo lo es, y si no, peor para ellos.

Y ha sido una conversación muy agradable también. Porque nos hemos paseado en un momento de nada, por los viejos lugares comunes. Libros, viajes, más viajes. Y ha sido como volver después de mucho tiempo a una ciudad conocida.

Sé que he sorprendido, pero no sé si he molestado, si he incordiado. Quién sabe, éste último mes he perdido totalmente el criterio para poder decidir la balanza. Siempre me creo lo que me dicen, y siempre tengo la impresión de llenar los huecos en la vida de la gente en los que esperan que pase algo realmente interesante.

Es igual. Me ha encantado habla contigo. Ojalá dentro de algún tiempo pueda contarte que sí que me animé, que sí que me lo pasé bien en ese viaje. Incluso igual puedo enseñarte alguna fotografía de la isla.

No, no lo espero, pero soñar es gratis. Ha sido una conversación agradable.

Seguiremos informando…