Paredes que ya no son lo que eran

Escuchando: Walls fall down (Tom Petty)

Esta mañana a primera hora, ha venido la persona que trabaja en la sala de al lado, aquí en la Universidad, a preguntarnos cómo andábamos de grietas en la pared. Le hemos contestado que como siempre; este edificio tiene grietas por todas partes desde el día en que lo abrieron.

Nos ha dicho que si oímos o vemos algo sospechoso, que se lo dig… no, mejor, que salgamos corriendo.

Hasta que no hemos visto cómo está su sala, no hemos comprendido.

¿Alguien tiene un casco de más?

Seguiremos informando…

Extraño

Escuchando: We might as well be strangers (Keane)

I don’t know your thoughts these days
We’re strangers in an empty space
I don’t understand your heart
It’s easier to be apart

The Movies

Escuchando: American Oil (The Movies)

El viernes fui al concierto de The Movies; ésta vez me acerqué solo hasta allí, pero da igual: ir a buen concierto en Santander es como ir a tomar una cerveza a Cheers; puede que haya poca gente, pero son las caras de siempre; y también hay cerveza.

Qué concierto más bueno. No sé cómo acabaron incluyendo Santander en su gira, pero bienvenido sea el detalle. Desde los primeros acordes, aquello fue una regresión a la New Wave, con sonidos que parecían más propios de Madchester que de un grupo californiano.

Pero eran yakies, sí. El Fuck Bush con el que presentaron el último bis, dio constancia de ello.

Lo que siempre me da rabia es que haya tan poca gente en este tipo de citas. Luego se quejarán de que no hay nada interesante… vale, es Santander, no jauja. Pero para un concierto bueno que tenemos, qué menos que acercarse. Digo yo. Bueno, al menos no me tuve que pelear demasiado con la gente para sacar unas cuantas fotos

Seguiremos informando…

Para los comerciales.Para los surrealistas.Para los clásicos. Para todos.

Escuchando: Satan rejected my soul (Morrisey)

Como suelo hacer los viernes, me he pasado por el videoclub, con la esperanza de pillar una película china que tiene buena pinta; pero mala suerte: sigue alquilada.

De todas formas no he salido de allí con las manos en los bolsillos (o sí, no recuerdo; pero en cualquier caso he alquilado películas)

Hace poco me hablaban bien de La Playa, esa película de Leonardo DiCaprio (puaj, puaj) rodada en Tailandia; precisamente la isla que da nombre a la cinta ha sido uno de los puntos más castigados por el maremoto en Asia. Habrá que ver la película, la presencia de Leo espero poder contrarrestarla con la protagonista femenina, la banda sonora tiene buena pinta, y además es del director de Trainspotting, así que algo bueno tendrá.

Me acerqué también al rinconcito donde está la estantería de los clásicos. dispuesto a cubrir alguna de mis brutales lagunas cinematográficas. Y, sorpresa, me llamó la atención una portada que nunca antes había visto por allí. Tristana, del maestro Buñuel. Al saco. Ponga un poco de surrealismo en su fin de semana, por 1,20 €…

Ya puestos, también metí en el lote una de esas películas que siempre he querido ver, pero por una cosa o por otra, nunca he tenido ocasión. El Halcón Maltés. Para disfrutar en versión original, que si no Bogart no suena a Bogart.

Con tan variado surtido cinematográfico me dispuse a pagar en el mostrador. Sorpresa, parece que el del videoclub ha relacionado mi nombre con mi cara, ha caído en que fui yo quien le hizo un favor hace unos meses a través de un amigo común (las grabadoras también sirven para hacer el bien) y me ha invitado a una película. Así da gusto; además que en su día ya me cobré ese favor en un trato de ídem para alquilar a la perlada Johansson

Pues eso. Muchas peliculas para el fin de semana. Y esta noche concierto. The Movies, claro.

Seguiremos informando.

Señores de la Agencia Espacial Europea…

Escuchando: Sinking Planet (Freak Kitchen)

Buenos días señores aeronáuticos; les expongo mi caso.

Hoy he tenido un día de esos en los que uno se replantea muchas cosas; un día en el que a Farruquito le devuelven el carnet de conducir; un día en el que, tras la sorpresa, la Iglesia rectifica, y vuelve a poner los puntos sobre la i de preservativo; Fraga también lo ha hecho, aunque apenas vocalice; un día en el que jurará su cargo, sobre la Biblia, con una cruz en una mano y un rifle en la otra, el mayor defensor de las libertades y la democracia del mundo mundial, también conocido como Estados Unidos de América. El que se vaya a gastar en seguridad, sólo hoy, una de esas cantidades inimaginables, es un detalle anecdótico, pero importante. Al fin y a al cabo, el control policial es la mejor forma, y la más democrática, de evitar que hippies con pancartas contra la guerra salgan en la foto.

Pero discúlpenme ustedes, que me voy por las ramas. Lo que quería pedirles es que, viendo como está el patio terrestre, me mantengan al tanto de sus avances por Titán. Y que si ven ustedes que la cosa puede dar para sobrevivir por allí, tengan la bondad de avisarme. Total, si me ponen un enchufe, yo me llevo unos libros, el iPod y la cámara de fotos, y feliz.

Atentamente se despide,

Roberto

Huellas de temporal

Escuchando: The Restless Waves (Dirty Three)

Cuando ayer al mediodía pasé por delante de la playa en el autobús, ya me di cuenta de que esas olas no eran normales. Era fácil medir su altura. Como un faro, poco más o menos. Espectacular.

Por eso, visto lo visto ayer, no me ha extrañado leer hoy esto en el periódico. Ayer la fuerza del oleaje se llevó por delante una de las siluetas más características de nuestra bahía: el arco de piedra en el islote de La Horadada. Cuentan en ese artículo la historia o leyenda de esa hendidura, citando…

…un texto del escritor montañés Amós de Escalante a propósito del origen legendario y fantástico del horadamiento de la roca, desde ayer perdido. Dice así Escalante: «el pueblo os dirá que allá, en los hondos cimientos de la catedral, donde no llegan humanos, yace escondido el barco que las trajo» y reflejaba cómo ese barco de piedra horadó la isla cuando en el siglo XIII arribó a Santander con las cabezas de los mártires Emeterio y Celedonio, patronos de la capital desde 1791 por decisión del obispo Menéndez Luarca.

Una pena. Pero ojalá todo lo que se perdiese en el mar fuera sólo eso, un trozo de roca.

Seguiremos informando.

Cuento sin principio #4

Escuchando: Triumph of the heart (Björk)

Fue una de mis lágrimas, se convirtió en un recuerdo acuoso que te llevaste con tu última caricia; no te duró mucho: se evaporó cuando me dijiste adios.

Hoy, forma parte de la lluvia que cae sobre mí, que huyo a pesar de haberme quedado; que cae sobre ti, que permaneces inmóvil a pesar de haberte marchado.

En la cuerda floja

Escuchando: Sur le fil (Yann Tiersen)

Sigo sin existir para Amena y Ono; por lo demás, ya tengo el móvil nuevo más o menos a mi gusto. Y eso incluye las fotos para los contactos y sobre todo, mis melodías. A mis ya habituales midis (The Cure, Monty Python, Spock’s Beard, Dream Theater, Dire Straits…) se une ahora la posibilidad de meter emepetreses como timbres de llamada. Y como no me gusta juguetear ni nada con estas cosas, pues he estado un rato antes pasándomelo cual enano, cortando canciones y pasándolas al móvil.

Y al final me he quedado con una melodía de llamada que, está mal que yo lo diga, pero es de lo más elegante que ha salido nunca de un móvil. Queda genial 🙂

Ahora me queda buscar un sonido para los mensajes… aunque el principio de Pagan Poetry tiene tiene todas las papeletas…

En fin. Que cada uno hace con su tiempo libre lo que quiere, ¿no? Pues eso :p

Seguiremos informando.

PD: Descubrimiento musical del día: Louise Attaque… ¡¡Gracias!!

Ni contigo ni sin ti

Escuchando: With or without you (U2)

Ni con Movistar ni con Vodafone, sino todo lo contrario; en el limbo de los móviles; por ahí es más o menos por donde ando ahora…

Hoy por la mañana se supone que dejo de ser de los azules y paso a ser de los rojos (Jaime, sin chistes), pero parece que unos me quieren adoptar, otros no me quieren dejar marchar, y tengo las dos tarjetas activas, puedo llamar desde cualquiera de las dos… pero nadie me puede llamar 🙁

En fin, estas cosas pasan, las bases de datos tardan en actualizarse, saturno no está en la órbita adecuada, yo que sé… cuando hice la portabilidad anterior también me llevó una mañana volver a estar localizable.

Así que eso: si alguien me intenta llamar, en lugar de escuchar el with or without you que tenía antes, escuchará el tirurí tirurí que le salía a Homer cuando cambiaron los teléfonos de Springfield. Esperemos que a lo largo de la mañana la cosa se vaya normlizando, y pueda usar mi nuevo móvil 🙂

Seguiremos informando

PD: Mientras escribía esto, la tarjeta de Movistar se ha desactivado, buena señal, aunque sigo sin estar disponible.

En enero, lluvias mil

Escuchando: The long and winding road (The Beatles)

Tanto buen tiempo, tanto solecito, tantos días de cielo azul… y se nos olvida que vivimos en Santander. Hoy la climatología nos lo ha recordado, aunque nos ha pillado a la mayoría a contrapié

Hoy al mediodía tenía que volver del trabajo a casa por el centro -un buen paseo, pero tenía que hacer un par de recadillos- y la cosa acabó siendo una lucha contra los elementos.

Las ráfagas de viento, sobre todo en algunas esquinas traicioneras, eran brutales. Que yo recuerde, es la primera vez que el viento me arranca (dos veces) los auriculares de las orejas.

Y claro, a ésto súmesele la lluvia, alternando entre calabobos y torrencial, sin previo aviso. En el tiempo en el que se abre un paraguas, uno ya está empapado. Aunque bueno, con esta combinación de viento y lluvia, llevar paraguas es tan útil como, por decir algo, ir con un botijo en la mano. Es igual de práctico. El paraguas no es que no sea útil, es que es super califragilístico; y expialidoso, tambien. Vamos, que hay riesgo de salir volando con él.

Con una humedad en ropa más elevada de lo deseable, y alguna varilla caída en acto de servicio, llegué a la conclusión de que donde mejor se está, es en casa. Afortunadamente, también llegué allí, a casa.

Abríguense. Seguiremos informando.