Escuchando: Prelude: Song of the Gulls (King Crimson)
No está mal sentirse, de vez en cuando, protagonista de una odisea. No con mayúscula, que esto tampoco va a ser una tragedia. Ni un poema, mucho menos épico. Pero.. ¿por qué no? navegar intentando regresar a casa, desoyendo cantos de sirena, enfrentándose a cíclopes monoculares para reencontrase con quien, teje que te desteje, nos espera.
Ser Ulises, reaparecer, pararme en la puerta, y decirle a Martina que he cruzado todos los mares de este mundo para saber que no puedo vivir sin ella. Qué bonito. Literalmente.
Lo mío es menos romántico, más de andar por casa. Con el toque tecnológico inevitable, deformación profesional. Pero no deja de hacerme gracia cada vez que, como hoy, digo eso de…
Hola, vengo de Ítaca para solucionar sus problemas con el correo…
Qué cosas…