Unas veces se pierde, otras se gana

Escuchando: Winners (K’s Choice)

Cómo quedar bien antes de tomar unos chupitos de orujo: pasando por delante de una Casa de Cultura, y entrando a ver una exposición de fotografías en la que, oh casualidad, hay seis fotos mías expuestas. Vamos, que ni hecho aposta.

Las fotos era del concurso de fotografía de Liébana, que por supuesto no he ganado. No esperaba hacerlo porque las copias que mandé no me gustaron (sé dónde no voy a volver a revelar fotos), y no tuve tiempo de repetirlas. Aún así alguna decente sí que me quedó, pero nada que ver con las fantásicas fotos que había el sábado por allí expuestas. El año que viene lo volveré a intentar.

Eso sí, de vez en cuando me siguen dando alegrías mis fotos. Como cuando el otro día vi en la tele de un bar un reportaje (conexión local en La 2) sobre la exposición del concurso del Festival del Mar, y dedicaron unos segundos a mostrar una de mis fotos a pantalla completa.

O como cuando ayer me llegó un correo avisándome de que la entrega de premios de otro concurso de fotografía de la Universidad será el próximo miércoles. Y dos minutos más tarde, otro correo del mismo remitente me comunicaba además que una de mis fotos está premiada… No sé nada más, no sé qué foto ha sido (una de las tres de arriba), ni qué premio he ganado (si es el primero, una cámara digital compacta; si es el segundo, una bolsa fotográfica).

Hace ilusión, en cualquier caso.

Seguiremos participando.

Actualización: me acaban de llamar y me han aclarado el tema del premio. No era ninguno de los que esperaba, parece que lo que me he llevado ha sido el premio a la mejor serie de tres fotografías (compitiendo con las presentadas tanto en carrete como en digital), y el premio es una cámara réflex. De carrete, supongo. Qué cosas.

Sí, sí, en el piso de abajo

Escuchando: My Ships (Devendra Banhart)

Esta tarde he pasado por la exposición del concurso de fotografía sobre el Festival del Mar. Se ha inaugurado hoy, y estará abierta -en la planta baja del Mercado del Este- hasta el fallo del jurado, a principios de diciembre.

Por allí andan expuestas las tres fotos que he presentado, aunque no destacan mucho entre las casi quinientas que participan en el concurso. Hay muchas demasiado típicas, eso sí. Llovió en su día y el recurso del reflejo de los barcos en los charcos lo han explotado hasta la saciedad, por ejemplo. Y otros muchos se han despreocupado de la horizontalidad del horizonte, pequeño detalle. Pero en general hay cosas bastante interesantes, la verdad es que la gente se lo curra bastante.

Las fotos que más me han gustado son las que yo no pude hacer: imágenes desde los veleros el día que intentaron hacer la parada de velas, con un tiempo infernal. Hay algunas fotos bastante espectaculares de esos momentos.

En fin. Pues eso. Que si tienen un rato se pasen a verlo, es gratis y merece la pena.

Seguiremos informando.

Premio de consolación, o consolador

Escuchando: Everybody loves a loser (Morcheeba)

Esta mañana he recibido una llamada, que me ha informado de que NO he ganado un concurso de fotografía. No todo el monte iba a ser orgasmo. En cualquier caso, es un detalle que se molesten en avisar a los partipantes personalmente; y lo que es mejor, parece haber un pequeño premio de consolación… este concurso estaba organizado por el Palacio de Festivales, y me han dicho en esa llamada que me darán una tarjeta, intuyo que una de éstas… menos da una piedra, se agradece el detalle.

Mañana se supone que en rueda de prensa harán público el fallo… yo por mi parte aprovecho para hacer públicas las fotos, que apenas había enseñado a nadie hasta ahora. Cada foto representa una arte escénica: danza, música, teatro y ópera.

Viendo las fotos, se podrán imaginar ustedes las risas que rodearon a la sesión, en plena calle, con trípode, cámara, flashes, un amigo aguantando el muñeco, y sesión de trabajos manuales para convertir una bola de ratón en una simbólica calavera. Surrealista.

Y por cierto, ese muñeco aún no tiene nombre. Se aceptan sugerencias…

Seguiremos informando.

Fotografía infinita

Escuchando: A Forest (The Cure)

El lema Cantabria Infinita con el que nos promocionan siempre me ha parecido bastante poco afortunado, pero a veces, en ocasiones, me da la impresión de que sí, de que Cantabria sí que puede ser infinita…

Estaba ahora seleccionando fotos para otro concurso (esto es un vicio, ya), cuando me he dado cuenta de la cantidad de fotos que tengo de Cantabria, todas de los dos últimos meses. Poco a poco se va convirtiendo en una costumbre eso de dedicar un día casi todos los fines de semana a explorar la región, una región que yo no conozco demasiado, la verdad, pero que voy redescubriendo a través de la cámara.

Y todo, también, gracias a un amigo, enciclopedia andante de rutas y turismo rural, con el que es imposible quedarse sin planes. Va por usted, Maestro.

Seguiremos fotografiando. En la próxima.

Autorretrato #5

Escuchando: This is the picture (Peter Gabriel)

Hace tiempo que había visto dibujos de muñecos personalizados, pero no sabía de dónde salían. Vale, tampoco había investigado mucho.

Gracias a Xan, he descubierto esta página donde uno se puede confeccionar su personaje a medida. Eso sí, cámara no tenían. Una pena. Beberé para olvidar.

¿Alguien se anima a mandarme sus autorretratos?

Seguiremos informando.

La ganadora fue la II

Escuchando: Hidden camera show (Tom McRae)

¿Hacía dónde salimos corriendo tras la comilona de ayer? A Los Corrales de Buelna, a la entrega de premios del concurso de fotografía, claro.

En mi línea: a pesar de haberlo leído un par de veces en el periódico, no me acordaba de dónde era el acto… ¿un teatro? ¿el Ayuntamiento? ¿la Casa de Cultura? Ni idea.

Lo descubrimos con el tiempo justo, y cuando por fin lo encontramos, bajamos las escaleras hacia la sala en cuestión, y escuchamos…

«Tercer premio, para Fulanito» (aplausos)

(ah, vale, menos mal, aún van por el tercero, justo a tiempo)

«Cuarto premio para Menganito» (aplausos)

(¡mierda!)

[Roberto se acerca sigilosamente a los repartidores de premios, y disimuladamente, y por la bajo, dice: psss…. pssss, aquí, que yo soy el primero]

«Primer premio para Roberto Ortiz» (aplausos)

Y así, tomé posesión del trofeo (veáse la foto) y de un sobrecito, y me invitaron a posar junto al resto de premiados… en mi caso luciendo mis mejores galas después de un día resacoso de excursión, camiseta de Kukuxumusu incluida. Lo dicho, en mi línea.

Allí tenían expuestas las más de doscientas fotografías presentadas al concurso, y lo que más me gustó fue comprobar que había mucho, mucho nivel. Había imágenes muy buenas, la que se llevó el segundo premio me pareció buenísima. Pero no seré yo quien discuta el fallo del jurado.

Tras la entrega de premios, una sesión de cañitas y charlas, vuelta a casa y fin de fiesta. Estuvo bien.

Seguiremos informando.

PD: Y sí, la foto ganadora fue la II