Piko Piko: el gusanito

Piko Piko

Hoy voy a hablar de otro juego infalible e imprescindible. Con él, además, comencé a descubrir la cantidad de juegos modernos que estaban apareciendo, aunque las jugueterías al uso siguiesen vendiendo lo de siempre. Ah, y también fue el primer juego que compré que estaba creado por un señor alemán llamado Reiner Knizia. Todo un personaje, doctor en matemáticas y diseñador de juegos profesional, que está detrás de muchos grandes éxitos actuales.

Por todo eso, y por lo divertido que es, hoy voy a hablar de los gusanitos. Prepáranse a jugar al Piko Piko.

Piko Piko

Este juego se vende en nuestro país con el nombre de Piko Piko el gusanito. También se puede encontrar como Pickomino o Heckmeck. Se trata de un juego de dados, que viene acompañado además de unas atractivas fichas. Se vende por unos 15€ y es cada vez más frecuente que las jugueterías tradicionales lo comiencen a ofrecer.

¿De qué va? Sencillo: los jugadores se convierten en pollos que a la hora de comer tienen en la mesa una serie de apetitosas raciones de gusano fritas. Cada ración (que se corresponde con una ficha) está numerada, del 21 al 36, y tiene dibujados algunos gusanitos (cuanto mayor sea el número de la ración, mayor cantidad de gusanos).

Piko Piko

El objetivo del juego es conseguir el mayor número de raciones posible. Gana el jugador que haya conseguido el mayor número de gusanitos (no la suma de los números de las fichas, sino la suma de gusanitos conseguidos). Y para conseguir una ración, hay que obtener su número asociado con los dados. Así de sencillo. O casi, porque tiene algunas particularidades para darle un poco más de chicha.

En primer lugar, los ocho dados tienen los valores 1, 2, 3, 4, 5… y gusanito. No hay 6, sino un dibujo de un gusano, que cuenta como cinco puntos.

Piko Piko

Un jugador en su turno tira los dados tantas veces como quiera, apartando en cada tirada los dados de un número a elegir. No se pueden repetir valores en sucesivas tiradas, y para que el turno sea válido tenemos que conseguir al menos un gusanito. Se explica mejor con un ejemplo… imaginemos que comenzamos a jugar, y en nuestra tirada obtenemos lo siguiente:

Piko Piko

Tenemos que quedarnos con los dados de un valor. En este caso, podríamos quedarnos con dos cincos, con un cuatro, con dos doses, o con tres unos.

Piko Piko

Elegimos los dos cincos, porque nos aportan 10 puntos; los apartamos y volvemos a tirar con el resto de dados, obteniendo ahora estos valores:

Piko Piko

Tenemos un gusanito, tres treses, un cuatro, y un dos. Elegimos el gusano, que nos suma 5 puntos, y además nos aseguramos de que si conseguimos sumar un número válido para coger ración (al menos 21 puntos), el turno será válido (al tener al menos un gusanito entre nuestros dados). Sumado a los dos cincos de antes, tenemos ya 15 puntos en total. Seguimos tirando con los cinco dados restantes…

Piko Piko

Hemos obtenido dos cincos (que no podemos coger, porque el 5 ya lo habíamos usado en la primera tirada), dos cuatros, y un uno. Elegimos los cuatros, y sumamos 8 puntos más a los 15 anteriores. Tenemos pues, 23 puntos.

Piko Piko

La ficha número 23 está sobre la mesa. Podemos cogerla y finalizar el turno, o seguir tirando para intentar obtener un valor más alto. Eso sí: si con los tres dados restantes no obtenemos ningún valor que no esté repetido (sólo nos valdrían 1, 2, 3), el turno se declararía inválido. En ese caso tendríamos que devolver la última ficha conseguida (y en la parilla se eliminaría la ficha con valor más alto). Somos sensatos, y nos quedamos con la ficha 23, sin tirar más dados.

Piko Piko

Imaginemos que nuestro contrincante sigue el mismo proceso, y obtiene la ficha 24 en su turno.

Piko Piko

Nos vuelve a tocar, tiramos los dados y obtenemos este resultado:

Piko Piko

Tenemos tres gusanos muy golosos. Los apartamos, sumamos 15 puntos con ellos, y seguimos tirando los otros cinco dados…

Piko Piko

Podemos quedarnos con tres treses (9 puntos), o dos cuatros (8 puntos). Elegimos esto último, para tener un dado más con el que jugar. Sumamos así 23 puntos. Como la ficha 23 ya la tenemos, podríamos llevarnos de la parrilla cualquier número inferior (el 21 o el 22 en este caso). Pero hay una posibilidad más divertida: intentar robar una ficha a un rival, obteniendo el valor exacto de su ficha a la vista (a medida que obtenemos fichas, se van apilando, siendo visible sólo la última). Esto es: si conseguimos exactamente 24 puntos, le podemos robar esa ficha al contrario.

Piko Piko

Lo intentamos y…

Piko Piko

¡Bingo! Podríamos usar el 3 para llevarnos la ficha 26, pero si nos quedamos con el 1, nos llevamos el 24 de nuestro rival. Lo hacemos, y apilamos la nueva ficha sobre nuestro 23 anterior.

Piko Piko

El juego continúa hasta que ya no queden fichas en la parrilla (bien porque se las hayan llevado los jugadores, bien porque se hayan eliminado por turnos fallidos). En ese momento, se hace recuento de gusanitos, y se averigua quién es el ganador. Al estar apiladas las fichas de cada uno, muchas veces hay sorpresas en el recuento…

Las partidas suelen durar entre 10 y 20 minutos. La edad mínima recomendada es 8 años, y se trata de un juego que gusta mucho, tanto a niños como a mayores. Ideal para sesiones en familia (hasta 7 jugadores). Es fácil de aprender, y siempre provoca unas cuantas risas… sobre todo cuando la avaricia rompe el saco, y algún jugador pierde su turno en el último momento…

Piko Piko

La verdad es que el juego, además, es precioso. Las fichas están muy bien diseñadas, y los dados son de madera. La caja no es muy grande, ideal para transportarla… aunque si buscamos algo más portátil, existe una versión de bolsillo realmente minúscula. Sólo he encontrado su versión en alemán, pero conociendo las reglas no presenta mayor problema… El juego viene guardado en una pequeña lata metálica tamaño pastillero:

Piko Piko

Piko Piko

Los componentes del juego son los mismos que en el original, sólo que las fichas están hechas de una fina lámina de plástico.

Piko Piko

Y sí, esta versión de bolsillo es muy, muy pequeña… para llevar siempre encima sin darnos cuenta.

Piko Piko

En nuestra ludoteca tenemos la versión normal, y la de bolsillo. Existen algunas versiones más. Por ejemplo, una versión para niños (a partir de 5 años) donde las fichas sólo tienen cifras de un dígito, y los dados tienen únicamente símbolos (dibujos de comida). También podemos encontrar una versión Barbacoa, con tablero de juego.

Y para cambiar de menú, existe una «segunda parte» en la que los gusanos se cambian por sushi y raspas de pescado. Pero ese es otro juego, también está en nuestra ludoteca, y de él hablaremos otro día

Seguiremos jugando…

Enlaces:
Página web de Piko Piko en Mercurio, su distribuidor español
Piko Piko en BoardGameGeek
Piko Piko Junior en BoardGameGeek
Piko Piko Barbacoa en BoardGameGeek
Reiner Knizia en la Wikipedia

3 comentarios sobre «Piko Piko: el gusanito»

  • Como bien me apuntan, en el segundo turno del ejemplo se podría haber robado el 24 cogiendo directamente los treses (15 + 9). Yo quería hacerlo un poco más largo… 😉

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    • Hola, Lorena. Hace tiempo intenté conseguir otro para regalar, y me dijeron que había sido una tirada muy muy limitada y que no se iban a vender más… que cuidase el que tenía. Así que calculo que sea difícil… 🙁

      Responder

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