No hay marcha en este seminario

Escuchando: Money for nothing (Dire Straits)

Dice la Iglesia que no quieren más homosexuales en sus filas. Que pasan, que no les piensan ordenar sacerdotes.

¿Será una medida de efecto retroactivo? ¿Expulsarán de su equipo a todos aquellos que ya son ambas cosas, homosexuales y sacerdotes? ¿Harán lo mismo con aquellos miembros de la Iglesia que comentan abusos a menores, por ejemplo?

Dado que la Iglesia siempre se permite opinar sobre cualquier aspecto de la sociedad, le incumba o no, me permito a mí mismo el derecho de opinar sobre ella, me incumba o no. Y opino lo siguiente: sostener que una persona, por ser homosexual, va a ser mal sacerdote, es una generalización. No estoy de acuerdo con ella, pero allá ellos, son sus reglas.

Ahora bien, he aquí otra generalización: nuestro Estado suelta año tras año una pasta gansa a una institución que discrimina claramente por la condición sexual de las personas. No sólo negándoles el acceso, sino también cargando contra los derechos civiles de aquellos que no comparten su modo de vida.

¿Hasta cuándo?