Escuchando: Mi juguete personal (Carlos Rodríguez)
Estaba antes guardando unos discos, cuando me he encontrado con el cd. Hacía mucho que no lo escuchaba, lo he sacado para verlo y ha acabado sonando, claro.
No quiero pomelo es una recopilación casera de canciones pop que unos amigos han ido grabando, para sí mismos o para músicos allegados, en su local de ensayo. Hay de todo. Desde los principios duncandhunescos de alguno, hasta canciones presentadas a Eurovisión; pasando por temas de un musical infantil sobre Charlie y la fábrica de chocolate (lo siento Elfman, no puedes luchar contra esto) o por aquella versión del tema de Star Wars con la que hace tiempo poníamos banda sonora a las guerras de bolas de papel en el trabajo.
Y hay también canciones que me traen muchos recuerdos. Días de risas, de canciones, de coros, de alcohol, de casas en pueblos, de música hasta las tantas de la mañana. Una de esas canciones, que conocimos desnuda y fue creciendo con el tiempo, es Mi juguete personal, de mi amigo Carlos. Aunque siempre la llamábamos la canción del tal Iván. O del talibán. Me tomo la licencia de dejar aquí la letra…
Cuentan una historia los más viejos del lugar
Se sientan y narran las desgracias de un tal Iván,
Un hombre distinto
Al que Dios no quiso dar el viejo arte de amar
«Es guapo y apuesto», decían las damas sobre Iván.
En cambio, en silencio él caminaba hacia el bar.
Su vida era fría, no encontraba una mujer,
El amor se olvidaba de él.
Y todas las noches, Iván volvía solo de beber
Y todos los días preguntaba a Dios por qué
Y Dios le decía, humillando al pobre Iván
Tú eres mi juguete personal.
Maldito seas, Iván
Yo no te hice para amar
Tú eres mío y no de los demás
Mi juguete personal.
Pero llegó el día
En que nuestro hombre decidió morir
Cogiendo el cuchillo, lo clavó dentro de sí
Y entonces pensó: tal vez esto sea amor
Ese puñal en mi corazón.
Maldito seas, Iván
Yo no te hice para amar
Tú eres mío y no de los demás
Mi juguete personal
Y si un dia por el Cielo me encuentro contigo
Yo te hice y yo te destruiré
Tú no tenías derecho a acabar contigo
Te lo aseguro, me acordaré
Maldito Iván.
Maldito seas, Iván
Yo no te hice para amar
Mi juguete personal.
Seguiremos canturreando.