Escuchando: Hate Song (The Posies)
Comienza la Semana Grande en Santander, nuestra semana de fiestas que hace ya bastantes años que no es tan grande. Y es que el espíritu festivo de esta ciudad deja bastante que desear; aunque parece que este año tenemos tregua, por eso de que se celebra el 250º aniversario de que este pueblo tiene título de ciudad. En otras ciudades, se sabe que se está en fiestas, entre otras cosas, por las aglomeraciones de gente y coches, y por la basura que se genera, que deja las calles como un campo de batalla a la mañana siguiente. Parece que esta vez será así, tal cual, en Santander; pero no por la diversión: entramos en Semana Grande con huelgas de transporte urbano y de recogida de basuras. Viva. Por otro lado, el comienzo de estas fiestas ha coincidido con el final de otras: las de los Baños de Ola, que ayer se cerraron con una fiesta en la playa: danza, quema de una falla y traca final con fuegos artificiales. Como no tenía nada mejor que hacer, me acerqué con la cámara, en plan autista, sustituyendo con los cascos la música verbenera por The Posies. Nunca había estado en esto de la quema de la falla. Curioso. Aunque había gente muy impaciente: bastantes se pusieron a gritar que la prendieran ya («ahora, ahora, que aprovechen«, decían) sin darse cuenta de que en ese mismo momento nuestro excelentísimo alcalde estaba inspeccionándola, justo detrás. Qué depistados… Así que nada, sin mucho espíritu festivo, allí estuve, vestido de sombra, que dirían Piano Magic. Viendo como se gasta dinero en encender fuegos de mentira, cuando apenas somos capaces de apagar los de verdad. Gran Canaria, Cáceres, Guadalajara… cenizas de las que lamentarse. Aunque también sirven para más cosas. Por ejemplo, para acercar la política, al pueblo, para hacerla más cercana, sacarla a la calle… Por lo barriobajero, digo. Qué país. Seguiremos informando. |