Escuchando: Virtuality (Rush)
El viernes comenzaron las fiestas en Santander, su Semana Grande, y con ella uno de los acontecimientos más esperados desde hace un par de años: la apertura de las casetas repartidas por toda la ciudad, que siempre consiguen sacar a todos a la calle para disfrutar de sus pinchos.
Este año aporto mi granito de arena friki para disfrutar de la selección de pinchos: hace un rato he publicado una capa para el programa Layar, con toda la información de las casetas.
¿Qué es Layar y para qué sirve? Se trata de un programa gratuito para móviles Android e iPhone (lo siento por los demás, de momento es lo que hay) que ofrece capas de realidad aumentada. ¿Mande? ¿Realidad aumentada? Sí, un nombre un poco pomposo para algo muy sencillo y muy divertido: se usa la cámara del móvil y el GPS para orientarnos, y el programa superpone en la imagen que vemos en la pantalla información adicional, en este caso sobre las casetas de pinchos.
Ejemplos prácticos: ¿cuáles son las casetas más cercanas? ¿qué pinchos ofrecen en la siguiente zonas de casetas? ¿cómo puedo llegar a una caseta en la que tengan alguna brocheta? ¿qué casetas están a menos de 200 metros? ¿qué ofrecen en la caseta de El Pícaro, por ejemplo? Todo esto se puede averiguar rápidamente gracias a Layar y a mi capa. Y si no sabemos cómo llegar, el programa ofrece indicaciones gracias a Google Maps.
Para usarlo, sólo hace falta instalarse el programa Layar (desde el Android Market o desde la App Store, gratis en ambos casos). Una vez instalado, hay que buscar y cargar la capa «casetas2010«, o directamente buscar capas locales y aparece ahí. Y con eso conseguido ya sólo queda jugar un poco. Tenemos una especie de radar en pantalla que nos indica dónde hay algo interesante, y podemos realizar búsquedas o limitarlas por distancia.
Que sí, que es friki, ya lo sé. Pero ha sido un ejercicio de estilo, y si alguien lo encuentra útil, pues genial. Se agradecerán comentarios y sugerencias si alguien lo utiliza. Es una ocasión como otra cualquiera de fardar de móvil, de usar el GPS que nunca encendemos (aunque sin él Layar también se orienta razonablemente bien) y de no perdernos ni un sólo pincho.
Con el móvil o sin él, estamos en fiestas ¡nos vemos en las calles!