Escuchando: The Passenger (Iggy Pop)
El viernes dediqué un rato (corto, y eso que me tuve que hacer fotos) a renovar mi pasaporte. El anterior estaba expedido en 2002, y caducó el año pasado. Sólo consiguió un sello, el de mi viaje a Praga de hace ya algunos años.
Mi nuevo pasaporte caducará en 2018, y espero que me acompañe en muchos viajes. De momento, será un elemento imprescindible en mis inminentes vacaciones: dentro de diez días desapareceré durante una semana larga. Creo que compraré alguna tarjeta de memoria más para la cámara, me vendrá bien. Comienza la cuenta atrás.
Seguiremos informando.