Escuchando: Los jóvenes mueren antes de tiempo (Deluxe)
Sé que es verano porque he estado dos veces en Madrid y hacía calor. Aquí en Norteña podríamos estar a las puertas de una esperada primavera, o viviendo un monótono otoño. No es que no haga calor, no es que llueva mucho, es que nos encontramos permanentemente en un día gris en el que puede que salga el sol un rato, o puede que te mojes. Lo que viene siendo un día de mierda.
A veces pienso que en esta ciudad una foto en colores resulta anacrónica. Sobre todo ayer. Podría escribir sobre ello, sobre la inminente semana grande (minúsculas intencionadas) o sobre mil chorradas, pero esta mañana Vodafone ha tenido a bien enviarme una injusta y abultadísima factura que me ha puesto del peor de mis humores. Espero que mañana pueda desquitarme en su sesión, en el bar de esa gente que discute los asuntos realmente interesantes de esta avejentada ciudad.
Seguiremos informando.