Escuchando: Fallen Angel (King Crimson)
Mis habituales inquietudes me acaban llevando a ver películas a cada cual más extreña. Esta semana no lo he hecho nada mal, y el resultado ha sido el siguiente:
5 Condiciones. Si digo que está codirigida por Lars Von Trier, la mitad de los lectores arquearán las cejas con interés, mientras la otra mitad pasarán directamente al párrafo siguiente. Este hombre nunca deja indeferente. Aquí el papel de Lars consiste en putear al otro director: Jorgen Leth. Este hombre hizo en el 67 un corto un tanto extraño llamado El Humano Perfecto. En 5 Condiciones, Lars Von Trier le obliga a rehacer ese corto 5 veces, poniéndole diferentes condiciones (u obstrucciones) para cada una de ellas. Más que película, experimento cinematográfico. Gustará a los seguidores de Lars Von Trier. Horrorizará al resto.
A+. Extraña. La vi en el videoclub y me llamó la atención. Najwa Nimri. Ambientada en un Festival de música. Personajes geeks. Me picó la curiosidad. Y se trata de una película bastante extraña, tres historias independientes que se cruzan en el Fesival A+ (por no llamarlo FIB, directamente). Sexo, drogas y tecnopop. Más cercana a la videocreación y al videoclip que a la película convencional, tiene una banda sonora de lujo, con temas inéditos de Najwa, Macaco… además de algunas otras perlas: Pixies, Stone Roses… Por lo demás, tampoco es muy allá. No especialmente recomendable, pero tampoco mata.
Cypher. De siempre, una de mis películas preferidas ha sido Cube. Original, claustrofóbica, con un fantástico final. Una obra maestra. Huyan como de la peste de su lamentable secuela, pero no dejen de ver la segunda película del director de la primera: Cypher. Un hombre consigue trabajo como espía industrial en una gran empresa informática. Sin embargo, poco a poco se va dando cuenta de que no le han contado todo. De que no le han contado nada, de hecho. Soprendente desarrollo, para una gran película de ciencia ficción. Muy recomendable.
Northfork. Otra que me miraba desde la estantería del videoclub y sabía que iba a acabar llevándome a casa. La historia tiene un arranque convencional pero interesante: a mediados de los 50, un pueblo de Montana va a quedar inundado tras la ocsntrucción de una presa. Un equipo de agentes del gobierno se encargan de convencer a los reticentes a abandonar sus hogares. Sin embargo, la película no fluye como uno se lo espera. No habla del drama de esas familias. No. Presenta a una galería de personajes a cada cual más surrealista, mezclando imaginería bíblica con miserias humanas, escenas oníricas y sobrenaturales con espectaculres paisajes, mezclando personajes a un lado y a otro de la muerte. Y ángeles. Sobre todo ángeles. El guión flojea para mi gusto, pero sólo por el placer visual que produce ver escenas cuidadas hasta el más mínimo detalle, e interpretadas por una buena colección de grandes nombres, merece la pena. Inquitante. Hermosa.
Seguiremos informando.