Año 2004 d.C. Toda Hispania está ocupada… ¿toda? ¡no!

Me gustaría saber hablar como los franceses. No hablar francés, que también. Hablar como ellos. Sin levantar la voz. Discutiendo con toda la educación del mundo. Sin salirse de su tono habitual, sea hablando de trabajo, contando un chiste o charlando en un bar lleno de ruido. Hablar siempre con un tono discreto, elegante, con el volumen justo.

En cambio, yo me gasto el habitual tono español, más espontáneo, más natural, más impulsivo, más violento, más pasional. Dejando entrever más de lo que digo, muchas veces.

Un tono español que intento controlar al menos para no alargar inncesariamente conversaciones accidentales, prescindibles, que se pasean por lugares comunes que no aparece o no se quiere que apetezca recordar, conversaciones con sonrisas, con frases y con tópicos que perfectamente podrían ser mentira, o podrían no serlo. Conversaciones que odio tener cuando en realidad me apetece una conversación de verdad… All this time… like sand in my hand… PD: Y no. No tenéis por qué entender todo lo que escribo…

El año pasado abrieron un restaurante en Tel-Aviv, en el que no servían nada. Pero de verdad. Tu ibas allí, te sentabas, elegías la comida, los camareros hacían como que te la servían… y al final te traían la cuenta (ésta sí, real) y tú tenías que pagar religiosamente por la no-comida…

Ésta es una de las muchas anécdotas que se contaron en la mesa de la cena del martes, una mesa con muchos franceses, bastantes griegos, un israelita y un español. Una cena en uno de los mejores restaurantes de Rennes, o eso nos dijeron. Podría ser cierto, porque el edificio era una casa del siglo XVI, y la comida, al más puro estilo francés, era hiper-elaborada, más estética que abundante, pero de chuparse los dedos… uy, no, que era un s itio muy fino… era… deliciosa.. sí, eso, deliciosa, que queda mejor…

El viaje a Rennes al final estuvo bien. No tuve problemas para coger el tren en el aeropuerto de París, y llegué a mi hotel a eso de las 10 de la noche. Subo a mi habitación, abro la ventana y…. ¿qué veo? el FNAC de la ciudad. Desde luego, así no hay quien ahorre…

Esa noche salí a dar una vuelta, cámara en bolsa, ya que iba a ser uno de los pocos ratos que iba a tener para explorar la ciudad…. una ciudad con 180,000 habitantes, plus 60,000 estudiantes, y eso se notaba: había mucho mucho ambiente, mucha gente joven abarrotando terrazas, calles y plazas. Tanta que en lugar de volver al hotel pensé en serntarme con una cerveza a ver pasar la vida francesa… por esas casualidades que tiene la vida, me encontré con mis colegas griegos, así que efectivamente, acabé con una Guinness en una terraza, disfrutando del buen tiempo y de la noche de la ciudad…

Al día siguiente ya tocó trabajar, luego a hacer cola para hacerme entender frente a una empleada del servicio de ferrocarriles franceses, y conseguir mi billete de vuelta a París, y de ahí corriendo a ver si me daba tiempo a entrar en FNAC antes de que cerrasen (prueba superada.. me dio tiempo incluso a pagar un dvd de Radiohead), al hotel a cambiarme y a la cena que os contaba… una cena que duró, desde el champagne del aperitivo hasta el souffle Grand Marnier del postre, 4 horas… y después una visita a algunos de los baretos y pubs de la ciudad… cervezas, risas, conversaciones en inglés sobre lo mundano y lo divino, y así hasta que llegué al hotel, a eso de las 4 de la mañana….

Una hora interesante, teniendo en cuenta que al día siguiente tenía que levantarme a las 8 para seguir trabajando. Fue duro, y por la mañana me pesaban los ojos y las cervezas (y el vino, y el champagne, y…. ) de la noche anterior, pero bueno, no pasa nada. La reunión acabó rápido, y yo me fui comer con los franceses mientras el resto, que se quedaban un día más en Rennes, se iban a visitar Mont St. Michel… qué rabia, qué envidia, si lo llego a saber, alargo un poco más el viaje… bueno, para la próxima…

La tarde de ayer fue dura: con cuatro horas escasas de sueño, fui cambiando el ronroneo del taxi por el del tren por el del avión (con retraso) por el del coche… hasta que llegué a casa, a eso de las 12 de la noche… con algún susto por el medio, como cuando al llegar al aeropuerto de París me di cuenta de que los billetes de avión estaban a nombre de Ortiz, Fernando. Que no sé quién es, pero yo no.

No tuvo mayores consecuencias, y pude montarme en al avión de Air France, y desgustar un bocadillo de queso, con pan del día anterior (literalmente, lo ponía en el envoltorio) y comprobar así en primera persona las cualidades de los cuerpos elásticos….

Además de bocadillos, el avión también incluía entre el pasaje dos ojos azules que yo acababa mirando una y otra vez, sin poder evitarlo. Habían superado en un punto el record conseguido por una de las encantadoras recepcionistas de mi hotel…

Y… y… y eso es lo que hay… me dejo en el tintero muchas anécdotas que pasarán a la lista de batallitas personales, pero en resumen, el viaje fue mucho más divertido de lo que esperaba…

Ahora a esperar hasta el siguiente, que por lo visto será en breve, y a Toulouse. Si hay que ir, se va.

El día de hoy ha sido más triste… como decía ayer, me entere de malas noticias. Hoy he pasado media mañana en un entierro… perra vida…

Seguiremos informando….

He vuelto….

Pero hoy he dormido cuatro horas escasas, he trabajado, he viajado en tren, en avión, en coche, me he enterado de noticias muy malas… y lo único que quiero es coger la cama…

Seguiremos informando…

PD: Eso sí, el viaje ha sido mucho mejor de lo que esperaba…

Para que os entretengáis hasta que vuelva….

Fotos de los conciertos de Dave Weckl Band, Bobby Floyd Trio y Juan de Diego Freaky Trio…

Las fotos de mis paranoias nocturnas en mi habitación…

Fotos de Santander, de un par de días que hizo bueno en Abril, y de mi paseo de ayer…

Las fotos que tiré en la terraza de la Filmoteca…

Y las fotos del cumpleaños de Vanesa… con contraseña, que voy a mandar ahora a Sandra en un mensaje, para que la distribuya…

Séanme buenos… a la vuelta paso lista…

Hoy los santanderinos mirábamos al cielo, con el ceño fruncido. Aquí pasa algo raro, pensábamos. Algo que no encaja. Distinto. Y claro, tardábamos en comprender que se trataba de un cielo azul, impoluto, acompañado de una excelente temperatura. Si el día de hoy hubiese sido una película, se habría llamado: Todos a la calle (Primavera 2004. El estreno más esperado de la temporada) Y es que, efectivamente, hoy parecía que estaba todo Santander por la calle, sobre todo por el Sardinero. Yo me cogí la cámara y me eché a andar (así tengo los pies a estas horas…) Y a pesar de la cantidad de gente, no me he encontrado a muchos conocidos, sólo me he quitado los auriculares del iPod tres veces en toda la tarde, dos de ellas para saludar a la lectora mac-era de estas páginas… El resto del tiempo: Pink Floyd, Satriani, Dire Straits, Freak Kitchen. Quería hacer fotos.. en concreto quería volver a hacer una, una de esas fotos que me salieron de chiripa, pero que siempre he querido mejorar un poco…. y creo que lo he conseguido, y además he hecho muchas más fotos, todas ellas tirando del modo manual de la cámara… también he comprobado que el fotógrafo de Canon tenía razón: las panorámicas quedan mucho mejor con la cámara en vertical… Ahora me he pasado un buen rato ordenando y seleccionando fotos, tenías bastantes en el tintero haciendo cola para publicarse en mi página y…. bueno, ya las tengo preparadas, pero las pondré mañana, que hoy no me da tiempo… y mañana espero que sí, antes de irme… Y es que no sé si lo había comentando por aquí, pero estaré hasta el miércoles por la Galia… reunión de trabajo… y no me apetece nada…. No me apetece mañana coger un avión en Bilbao, para ir a París y coger corriendo un tren hasta Rennes, llegando de noche… ni me apetece madrugar el martes para ir a una reunión en la que seré el único hispano(poco)parlante, y en la que seguramente se discutirán hasta la saciedad temas que no me interesan… tampoco me apatece irme luego de cena con mis compañeros franceses que hablarán francés entre ellos, y griegos, que hablarán griego entre ellos… cena que acabará tarde, por lo que no me apatecerá madrugar el miércoles para seguir con la reunión, que espero que acabe pronto para volver a coger un tren, llegar hasta el aeropuerto de París, y coger allí un avión hasta Bilbao… Vamos, que en general siempre me apetece viajar, aunque sea por trabajo. Esta vez no… Pero bueno, hay que estar a las duras y a las maduras… No sé si escribiré aquí mañana antes de irme, supongo que sí… tampoco sé si podré escribir desde Francia, espero que sí, que pueda conectar el portátil en algún sitio… En cualquier caso, sea desde donde sea… seguiremos informando….

Ayer por la noche, cumpleaños de Vane… algunas risas, algunas fotos (que en breve pondré en mi página…) y bastantes lágrimas… pero de emoción, que es lo que pasa cuando la tarta la trae quien uno menos se lo espera… ¡qué bonito!

Por lo demás, voy a ver si aprovecho la tarde de hoy para dar una vuelta, hacer algunas fotos o perderme por ahí… eso sí algunas malas noticias que rondan el ambiente no se convierten en peores noticias… (yo y mi capacidad de manternerme dormido mientras suena al teléfono… ays…)

Y mientras tanto, seguiré como ahora mismo: escuchando canciones que me recuerdan a gente de la que no me quiero acordar ahora mismo, y leyendo reportajes en revistas sobre lugares de los que tampoco me quiero acordar ahora mismo…

Seguiremos informando….

Ayer pasé por una tienda a preguntar precios y ofertas de cámaras digitales réflex. Tienen una oferta de lo más tentadora…. pero al final he decidido ser prudente, tengo algunos otros gastos a la vista, y dejaré el capricho para más adelante… Seguiré con mi Canon, que con sus limitaciones, sigue siendo una joyita… Y como muestra varios botones, porque hoy tengo bastantes fotos para colgar aquí… Ayer hice mucho el tonto con ella…

Estuve en la segunda jornada del ciclo All That Jazz de la Filmoteca. El documental iba sobre cantantes (femenino plural) de blues y jazz… Billie Holiday, Dinah Washington, Sarah Vaughan, Peggy Lee… una delicia.

Después del documental, a subir escaleras. Tercer piso. Sala multiusos reconvertida en pub improvisado.. una copita y a disfrutar de muy muy muy buena música…

Además ayer, a diferencia de la semana pasada, hacía muy bueno, así que descubrí otro rinconcito de la Filmoteca que no conocía: su terraza. Muy buena música, muy buen ambiente, una copita, aire libre y tejados… ¿se puede pedir más? Encima, la rubita grungie repitió y volvió a dejarse ver por allí… aunque no es tan grungie, ni tan rubita, ni tan perfecta como el primer día, pero ¿a quién le importa?….

Y por último, el concierto, Juan de Diego Freaky Trío. Muy buenos. Se mantiene el nivel. Y por supuesto, además de disfrutar de la música, hice un montón de fotos, de las que algunas no han quedado ni tan mal… En condiciones con poca luz, puedo sacar fotos, pero me mete mucho ruido (como decía antes, mi cámara tiene sus limitaciones…) Aún así, prefiero mis fotos así, imperfectas, antes que liarme a flashazos, como alguno pesado «di sotto» que había por la sala… Una foto de un concierto con flash mata la iluminación del escenario, aplana los detalles y lo llena todo de sombras desagradables…

Es mucho mejor hacer ejercicio de pulso, de paciencia y jugar un poco con la cámara, para conseguir fotos más naturales….

Seguiremos informando…

En un lamentable ejercicio de (falta de) concentración, el conductor del autobús municipal que me traía a la Universidad hoy, se ha equivocado. Con decisión y coraje, sin asomo de duda, haciendo gala de una conducción arrabalera y pendenciera, se ha salido de una rotonda por donde no debía….

No pasa nada en una zona en la que hay tantas rotondas que en vista cenital parece los campos de trigo británicos cuando hacen sus dibujitos los extraterrestres o los domingueros aburridos, pero gracias al detalle tonto, el autobús ha pasado por al lado del Palacio de Deportes…

Y no debería haberlo hecho…

Empezar la mañana viendo a una horda de madrugadoras descerebradas haciendo cola ya (y a saber desde cuándo llevan ahí…) para el concierto de Bustamante de esta noche, no es lo que yo llamo empezar bien….

Pero bueno, espero que cojan muy buen sitio, y que consigan estar tan cerca del escenario que el Busta les pueda escupir y todo.

Es más, ojalá lo haga.

Por mi parte, ni en conciertos que lo merecían mil millones de veces más he hecho más de un rato de cola. Y luego he estado lo suficientemente cerca como para hacer fotos…

Seguiremos informando…

Hoy cuando iba en el bus camino de la Universidad (a mi soporífera clase de doctorado… zzzz….) me he dado cuenta de que de los tulipanes de la foto ya sólo quedan los tallos. En cambio, capullos hay muchos, por lo que veo….

Esta tarde, después del curso me he acercado con Fito a El Corte Inglés, pero no para comprar nada, sino para asistir a una charla organizada por Canon sobre fotografía digital… tenía buena pinta, porque la iba a impartir un fotográfo profesional, a sueldo de Canon, para temas de formación….

Al final ha sido mejor de lo que imaginaba… el paisano me ha caído muy bien, supongo que influya el que llegó acompañado de un Apple Powerbook de 17 pulgadas, y el que confesase que para almacenar fotos suele usar un Apple iPod….

Al principio, preguntó al respetable cúantos tenían cámara digital… todos… después preguntó qué modelos teníamos… había por allí gente con Canon EOS 300D y con Nikon D70 (grrrr)…. Cuando yo le dije que tenía una Canon G3 no pudo evitar un gesto de satisfacción, se ve que es uno de los modelos de Canon por los que siente predilección. No me extraña

Claro, que cualquier cámara quedaba en ridículo al lado de lo que él puso encima de la mesa… aparte de una G5, y una Pro 1, sacó su herramienta actual de trabajo:Canon EOS 1D Mark II. Brutal. Descomunal. Aparte del intimidante objetivo con el que nos apuntaba, la cámara en sí es lo más bruto que he visto así, en vivo… se puso a tirar fotos en ráfaga a ritmo de 8 capturas por segundo. Una ametralladora. Impresionante. 3500 euros más iva, sólo el cuerpo. Una burrada, pero hace sólo un par de años una cámara así era impensable, y lo que había, valía tres veces más…

El mensaje de la charla fue claro: la fotografía digital mola. Cantidubi. Bueno, eso es algo que yo ya sabía… Gran parte de su presentación era, obviamente, marketing de Canon. Sin embargo, lo iba adornando todo con anécdotas y curiosidades, e hizo algunas demostraciones de creación de panorámicas y de control remoto de la cámara desde el Mac, algo que yo no había probado porque no sabía que había versón para Mac OS X de esos programas… (pero ya está, ya lo he probado yo en casa también jejeje)

Mereció la pena la visita. Salí sabiendo algo más de las cámaras Canon, y algo más sobre fotografía digital, así como con ideas nuevas para probar (qué tonto… ¿cómo no se me había ocurrido antes hacer las panorámicas con la cámara en vertical?)

Lo único malo ha sido las consecuencias que más tarde o más temprano (y me conozco, y va a ser lo segundo) va a tener esto en mi maltrecha cuenta corriente…. 3500 euros son mucho dinero… Ni loco. Pero por bastante menos uno se puede hacer de una réflex digital….

De mayor quiero ser fotógrafo (aficionado)… tener un portátil mac (más grande) y una cámara digital… réflex…

¿28 años es suficiente para ser mayor?