Días grises…
Ayer me pasé media tarde reformateando un ordenador, actividad para la que siempre cuentan conmigo, pero que me aburre de una manera inimaginable. A cambio me dieron una lata de bonito… 
Al menos lo hice rápido (tiempo record: dos horas y media…) y me dio tiempo a estar un rato con mi sobrino y demás familiia, y a escaparme a pensar en mis cosas mientras ojeaba libros (algunos los hojeaba también) en la Feria…
Y acabé el día precisamente terminando un libro: Dos mujeres en Praga. Cuando todo el mundo me hablaba bien de ese libro, tenía miedo de que fuese una novela convencional, y no con el toque surrealista e inquitante que siempre pone Millás. Pero no. Es Millás 100%, una locura, una delicia de libro…
Y como cuentan en esa historia, uno acaba pensando en los «lo que no» y en los «lo que sí»… y basta cruzarse con una cara por la calle, una cara que recuerde otros tiempos y otras personas, para tener más presente que nunca un «lo que no», que ni mil «lo que sí» parecen permitirme olvidar….
En esta época del año, de días grises, otra de las características es la abundancia de colecciones en quioscos. Una de ellas, dedicada a Saramago, tiene como oferta de lanzamiento dos libros (Ensayo sobre la ceguera y Todos los nombres) que me he comprado… el año pasado hice lo propio con La Caverna, libro que me dejó muy buen sabor de boca y una frase, tan cierta entonces como ahora: lo malo no es tener ilusiones, sino ilusionarse…
Seguiremos informando…
PD: Curioso esto de la memoria… ayer me vino a la cabeza una canción, pero no sé por qué… además me acordé no sólo de la canción, sino de una vez que la escuché en el hilo musical del aeropuerto de Frankfurt, otro día gris… Why worry, de Dire Straits…
Curioso…
