365 días nuevos a estrenar

Escuchando: As I am – Live (Dream Theater)

Uvas, cuartos, campanadas, besos; petardos, serpentinas, ruido; coches, autobuses, taxis; corbatas, minifaldas, escotes; copas, bebida, brindis; risas, conversaciones, música. Ya saben ustedes: lo que viene siendo Nochevieja, un año más.

Yo al final salí; la lluvia que amenizó la cena y las uvas no animaba mucho, pero al final, paraguas en mano, salí a tomar algo. Y no falla, mi paraguas es infalible para no mojarse: es sacarlo a la calle y dejar de llover. Murphy dixit.

Ha sido mi Nochevieja más tranquila, con diferencia. Me tomé una copa, por la cosa de brindar, y poco más. Pero me lo pasé muy bien, nos juntamos los de siempre, incluyendo algunos a los que cuesta ver, menos algún otro que había decidido cambiar de aires (¡Happy New Year!). Conversaciones de esas de madrugada, bromas, apagones, encuentros con mucha gente (esto es Santander, somos cuatro gatos…) Yo era fácilmente reconocible, era el único del grupo que no llevaba traje, que no llevaba corbata, que iba cómo si fuese una noche más, salvo algún ligero cambio de look, igual que el año pasado…

A las seis de la mañana, cuando estábamos en el bar de siempre, y la gente empezaba a dejarse caer por los asientos del rincón de siempre, decidí que era hora de irse dando un paseo a casa, sorteando serpentinas, bamboleantes transeúntes y alguna que otra disputa en las calles de siempre…

Llegué a tiempo de descansar, dormir, levantarme sin resaca para disfrutar de los platos de mi mamá, jugar con mi sobrino, y disfrutar tranquilamente de este primer día del año.

Espero que casera, festiva, ebria, sobria, tranquila, desenfrenada, tradicional u original, su primera noche del año haya sido un buen comienzo.

Seguiremos informando.

PD: Lo único malo de la noche: el haber llegado a casa con esas palabras en la cabeza; de tanto oírlas, se acaban quedando grabadas, como la cinta de ampliación de vocabulario de Homer. Si alguien me pregunta por una frase que resuma la noche de ayer, saltaré como un resorte: antes muerta que sencilla. Horreur. Menos mal que tuvimos el contrapunto en la sobredosis de Amaral en el primer bar, en la canción de los Fraguel, y en un inesperado Highway to Hell. Menos mal.

8 comentarios sobre «365 días nuevos a estrenar»

  • pues te puedes creer que no he escuchado el ‘antes muerta que sencilla’ todavía? porqué se ve que cuando la pusieron a la 1 o así (en la tele), yo estaba con el perro dando una vuelta, tomando el aire, porqué no había quien aguantase tantas horas en esa casa de locos!

    y bien feliz que soy, oye! que debo ser la única que no la ha escuchado, jajaja.

    besos,
    aroa

    Responder
  • Ay!yo tb fuí de bares y esa canción es un infiernooo!Jopé q suerte..escuchaste los fraguel rock!me da un sincope si me la ponen a mi(es q tengo el vinilo en csa, son mi idolos!!)
    besotess, mi noche tb fué trankilita:D!

    Responder
  • Aroa: Qué envidia. Sigue así, que no se rompa la burbuja 😛

    Grialita: Me parto… ¿tú TAMBIÉN tienes el vinilo de los Fraguel???? ¡Es genial!! 😀

    «Mira ese bichito donde estaaaá…»

    :p

    Besos…

    Responder
  • Me alegro que lo pasaras bien, nuestro plan también era bastante tranquilo… juntarnos en casa con algunos amigos… pero al final salió todo mucho mejor de lo esperado… y estuvimos hasta las 7 y pico de la mañana con churros incluidos…
    Eso sí… al levantarme tuve que limpiar toda la casa… pero como lo pasé tan bien no me importó…
    😉

    Responder
  • Yo a las 4 de la mañana estaba bailando desaforadamente (como sólo hago en contadas ocasiones, afortunadamente)en un local de Santander cuando, sin previo aviso, pusieron la canción de la niña esa. Y ese fue el final de mi fiesta. A las 6 estaba plácidamente dormido y soñando (supongo) con música de verdad.
    En fin, eso me pasa por ser condescendiente y dejarme llevar a los bares.

    Responder
  • Hombre, Jaime, tampoco hay que ser tan radical. Si llego yo a hacer eso me voy a casa a las 2 :p El truco para sobrevivir con la canción de la niña repelente es aprovechar para ir a los servicios, salir a tomar el aire, ponerse a pensar en algo bonito, en Herodes…

    Las 10 primeras veces funciona 😉

    Y los bares no tienen por qué ser malos. Tienen cosas malas, como la música, pero tambien tienen cosas buenas :p

    Responder
  • A lo mejor también ayudó que mi novia llevaba desde las 6:30 del día anterior sin dormir y claro, hasta ella sucumbe a tamaña paliza.
    Y yo aproveché para hacer lo que siempre quise hacer y nunca había conseguido: irme en lo mejor de la fiesta, justo antes de que todo empiece a ir a peor.
    Y digo lo de dejarme llevar a los bares no porque no me gusten (pocos sitios mejores para entablar conversaciones inolvidables y hacer amigos eternos), sino porque prefiero elegirlos yo mismo. El que yo había pensado SIEMPRE es mejor que al que me llevan.

    Responder
  • Asi que este año ha sido el de las nocheviejas tranquilas, eh?

    Yo seguí fiel a mis tradiciones, y contribuí a la oxidación (un poco más) de mi mala salud de hierro, mojándola con incontables copas.

    Incontables no por la cantidad, sino por capacidad del contador, cada año más mermada. Ah!. La edad, los kilos… en fin.

    Resumiendo: Que vaya torrija que me agarré. No recuerdo si escuché a la niña repelente (otra de tantas), pero no hizo efecto en mí… estuve inmune!

    Responder

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.