Acabo de terminar un libro que me ha gustado mucho, pero que por otro lado tenía muchas ganas de acabar, de cambiar de personajes, de escenarios, de devolverlo a la estantería….
Tal vez fuese porque en realidad no lo conoció ni se enteró de lo que le había ocurrido.
El Dios de la Pérdida
El Dios de las Pequeñas Cosas.
No dejó huellas en la arena, ni ondas en el agua, ni imágenes en los espejos.
Naaley.