Hace unos días hablaba con una amiga sobre libros. Nos recomendábamos algunos, no nos recomendábamos otros… y coincidíamos en una manía: no dejar un libro a medias, por tostón que pareciese…
Sin embargo, yo he de confesar que hay un libro que me va ganando la batalla, y que espera en la estantería a que un día me anime y lo retome con energías renovadas… Hoy es un buen día para hablar de ese libro….
Ulises, de James Joyce. O mejor dicho: Ulysses, porque lo que tengo yo es la versión inglesa, comprada directamente en el lugar de los hechos: el corazón de Dublín. Sí, ese fue uno de los souvenirs que me dio a mi por traerme en mi única y añorada visita a esa maravillosa y cervecil ciudad…
Y claro, si ya en castellano es un libro de los que hay que mirar de frente, con pose de duelo del oeste, ya en versión original y sin subtítulos… es una tarea que empecé, pero me faltaron las fuerzas y el tiempo para continuar…
Pero ahí lo tengo, y a Joyce pongo por testigo que un día de estos me leeré de cabo a rabo las aventuras de Leopold Bloom y sus paseos por Dublín, por sitios que me traen muchos y buenos recuerdos, aquel 16 de Junio de 1904, hace hoy exactamente cien años…
Seguiremos leyendo…