Los viernes no suelo salir por la noche… aprovecho la tarde para descansar, para leer, ver algún dvd o acercarme a la Filmoteca, dando un paseo…
Pero hoy no he ido a la Filmoteca, aunque tengo alguna película pendiente de ver allí… no, hoy he ido más allá…. me he ido hasta la escuela de Marina a un concierto de jazz…
Sí, me gusta el jazz, es una de mis rarezas. Mezclo a Miles Davis con Radiohead, a Coltrane con U2, a Art Blakey con Manolo García… yo soy así…
Eso sí, sigo intentando autoconvencerme de que es mejor ir a los conciertos solo, que bien acompañado… en fin, cosas mias…
A lo que iba (o a lo que fui…), hoy he visto dos mini-conciertos de 45 minutos cada uno… el primero, un trío de saxo, contrabajo y guitarra. Fantásticos. El segundo, piano y voz femenina. Inmensos. En cualquiera de los dos casos, estándares de jazz, lugares comunes revisitados, rearreglados, rediseñados, reinterpretados, rehechos…
En concreto, el segundo concierto ha sido especialmente destacable. Era la presentación en sociedad del grupo: Tea For Two. Él, un pianista al que ya había visto en otras formaciones de jazz (virtuosismo puro). Ella, una completa desconocida. Una voz quizás demasiado dulce para el jazz, pero que sabe cuando sacar el genio… un buen gusto exquisito… una compenetración perfecta. Un público entregadísimo.
No puedo negarlo, salí del concierto como Lina Morgan: agradecido y emocionado. Si veo anunciado algún concierto de Tea For Two, no faltaré. Os lo recomiendo. Avisaos estáis….
Seguiremos informando….