Lo que necesitaba

Escuchando: All I Need (Radiohead)

Ha sido un fin de semana largo, tranquilo, casero, con alguna celebración, unas cuantas películas, series, algo de trabajo, buen tiempo y ante todo calma, mucha calma.

Recomendación para terminar la semana: la canción que estoy escuchando, del nuevo disco de Radiohead. Háganse con ella, es tan barata como quieran.

You’re all I need
You’re all I need
I’m in the middle of your picture
Lying in the breeze

Seguiremos informando.

Caótica

Escuchando: Song for Ana (Deluxe)

Tenía curiosidad y opiniones para todos los gustos, generalmente encontradas. Esta noche me he acercado al cine para ver la última película de Medem: Caótica Ana.

Sin duda, lo más acertado es el título. Sus obras anteriores suelen contarse entre mis películas favoritas. Con ésta creo que rompo la racha. No me ha disgustado reconocer su estética, su mirada, su forma de narrar; es una lástima que lo que cuente la historia sea un batiburrillo que a mitad del metraje parece tomar cuerpo, pero que termina dando tumbos con poco ton y nada de son.

Lo mejor, descubrir a Manuela Vellés. Sin duda. Por lo demás, prefiero a la Ana de Otto.

Para terminar el día, y recuperar la fe en las películas coherentes, nada mejor que ver Atrapado en el tiempo; igual que ayer.

Seguiremos informando.

Otoño, invierno, primavera, verano… y otoño

Escuchando: First day of my life (Bright eyes)

Después de un fin de semana del que he salido con un premio, pero también con algún áccesit de tos, llega el lunes; que podría ser uno cualquiera, pero que no lo es.

No necesito hacer memoria, contar viajes, risas, miradas, canciones, paseos, ni mirar fotografías para hacer balance de lo que es obvio: que mi rutina en poco se parece a la de no hace tanto, y sigue siendo tan nueva como cuando aún no hay costumbres. Con la misma ilusión con la que se coloca una pieza nueva cada mes, con la misma esperanza por los pequeños y reconfortantes momentos cotidianos.

Es otoño: vuelven el tiempo desapacible, las tardes de quedarse en casa, la lluvia, la calefacción, las películas, los planes, los grandes proyectos, y también los más modestos.

Now I don’t know where I am
I don’t know where I’ve been
But I know where I want to go

And so I thought I’d let you know
These things take forever
I especially am slow
But I realize that I need you
And I wondered if I could come home

Seguiremos llenando días con nuestras pequeñas historias. Gracias.

Metales romanos

Escuchando: We are the champions (Queen)

Ayer me llamó un desconocido para felicitarme, y no era mi cumpleaños: he ganado el premio de honor a la mejor serie de tres fotografías, en el concurso de las Guerras Cántabras, certamen al que voy a coger un cariño especial. Las imágenes son las que encabezan estas líneas, todas ellas tomadas durante el desfile de las tropas romanas por las calles de Santander.

Cuando vi aquellas fotos con calma, supe que había material para presentarme. Días después estuve en el centro de estas fiestas, en la localidad de Los Corrales de Buelna, visitando el campamento romano y el poblado cántabro, pero anduve falto de inspiración; saqué pocas fotos y muy normalitas. Además viendo la cantidas de cámaras por metro cuadrado que había por allí, supuse que iba a tener mucha competencia en el concurso.

Al final, y apurando las fechas para variar, me presenté con unas cuantas fotos del desfile me que gustaban, las metí en un sobre, las envié por correo y me desentendí del tema… hasta ayer.

Dentro de un rato salgo hacia la entrega de premios, una fantástica forma de comenzar el fin de semana…

Seguiremos participando.

Siga a ese autobús, a distancia de enfoque

Escuchando: Bathroom girl (Air)

Estoy seguro de que una empresa de «cerámica, baño, hidromasaje» puede anunciarse de manera más elegante. Aunque puede que no tan llamativa. Visto hoy en un autobús detrás del que circulaba en coche con unos amigos.

La empresa, por cierto, tiene página web y por lo que me ha parecido entender, la foto de marras está extraída del catálogo de una marca italiana, de diseño de sanitarios. Qué cosas.

Seguiremos informando.

Pague lo que quiera por este disco

Escuchando: Paranoid Android (Radiohead)

Hace tiempo que pienso que si hay un grupo de rock vanguardista, adelantado a su época, y a años luz del resto, ésos son Radiohead. Sus dos primeros discos son intachables, y el preludio a uno de esos trabajos enormes, increíbles: una obra maestra llamada OK Computer. Luego, en lugar de recrearse en su éxito, se han dedicado a reinventarse en cada trabajo, a ponerse al límite, a sorprender siendo ellos mismos, manteniendo siempre un sonido reconocible. Lo que todos persiguen pero pocos, muy pocos, consiguen.

Unos genios.

Y ayer han vuelto a demostrar que ellos sí han cambiado de siglo. Se rumoreaba que su esperado nuevo disco iba a aparecer el año que viene. Pero no. Sorpresa, sale el 10 de octubre, dentro de unos días. Y lo ofrecerán ellos mismos. Nada de discográficas ni de intermediarios.

Venden su disco en dos modalidades. La primera, como disco «físico», en formato de lujo, a precio de ídem. Unos 58 euros al cambio, por obtener su nuevo trabajo tanto en disco compacto como en vinilo, con extras variados: libretos, otro cd y otro vinilo con más temas, etc.

La segunda forma de comprarlo es mediante una descarga desde su página web (también incluida en la modalidad anterior). Y ahora es cuando viene lo bueno: ¿cuánto vale su disco en formato electrónico? Lo que el comprador quiera.

Efectivamente. Todo un puñetazo en la mesa de las discográficas. Si se elige descargar el disco, se añade a una cesta de la compra, y a la hora de pagar hay que introducir un precio, incluyendo la opción de no pagar nada por él.

Cada cual podrá pagar lo que considere oportuno. Los más forofos se comprarán la caja con los discos y vinilos. Muchos pagarán algo simbólico a cambio de obtener las canciones en formato eléctrónico con buena calidad. Y los que no pensaban comprarlo, lo podrán obtener igualmente sin cometer ninguna ilegalidad.

Lo dicho: unos genios. Seguiremos aplaudiendo.

CineSpaña

Escuchando: Making movies (Dire Straits)

Una de las razones para viajar a Toulouse precisamente los días que lo hice, fue su festival de cine español. Nuestros amigos colaboran allí como voluntarios desde hace unos años, y tenía ganas de ver el ambiente que se respiraba en un acontecimiento así; nunca había estado en un festival de cine.

El viernes estuve en la fiesta de inauguración. No hay nada como tener contactos. Discursos en francés, algunas autoridades, una película que nos perdimos, unos canapés que no, y retirada a descansar. Estuvo bien.

El sábado sí que fui a ver una de las películas en competición. Un estreno, aún no ha llegado a España: 53 días de invierno. Historias cruzadas -paralelas, más bien- en torno a distintos modos de enfrentarse a la soledad, y las razones que llevan a ella. Me recordó poderosamente a una de mis películas preferidas, Wonderland, salvando las distancias. En cualquier caso, una película con unos tintes demasiado tristes para según qué momentos. Estuvo bien, con todo. Y voté a la salida, claro.

Lo más curioso de todo esto fue terminar tomando unas cervezas con algunos de los invitados al festival. Por allí andaban la directora y una de las protagonistas de la película que había visto. Y también dos actores a los que me hizo ilusión conocer en persona: Nancho Novo, y Tristán Ulloa, acompañado de su hermano David.

Curioso, esto de los festivales, sin duda.

PD: Sólo hice una foto de todo el festival, la que acompaña estas líneas, pero salío en cartelera. ¡Gracias!