Inspiración jubilar

Escuchando: Original of the species (U2)

Este 2006 es Año Jubilar Lebaniego. Esto es, año de peregrinación al monasterio de Santo Toribio, en Liébana, famoso por albergar un trozo de la cruz de Jesús (si los juntan todos, seguro que se puede construir el Arca de Noé). Al pasar por la Puerta del Perdón te formatean los pecados, o algo así. Tampoco es que esté yo muy puesto; además a algunos pecadillos ya les he cogido cariño. No es plan.

Bromas aparte, con motivo de todo esto, Cantabria está haciendo campaña (por ahí anda nuestro presi Revilluca regalando pulseras a todo el que tenga muñeca) para atraer gente a nuestra tierra, en especial a la zona de Liébana. Y sinceramente, de peregrinación o de turismo, la visita merece la pena. Cantabria tiene rincones espectaculares, y Liébana es uno de ellos, sin duda. Véase la fotografía de la excursión del pasado domingo para hacerse una ligera (muy ligera) idea.

Toda la información sobre este Año Jubilar (actividades, conciertos, etc.) se irá publicando en la página web que ha montado el Gobierno de Cantabria. Gran idea.

Una lástima que una página como ésta, pagada con dinero público, y encargada, supongo, a profesionales del ramo, me haya llamado la atención nada más verla por un pequeño detalle. Nada, una minucia. Una tontería insignificante.

Total, a Apple seguro que no le molesta que le fotocopien el diseño de sus iconos. Es por una buena causa. Y seguro que el culpable de este gesto de falta de inspiración ya ha pasado por la Puerta del Perdón. Todo arreglado entonces.

Seguiremos informando.

Acerté

Escuchando: Get it right (The Bellrays)

Pensaba que iba a ser un conciertazo, y me he quedado corto. Impresionantes, The Bellrays. Sonido sucio, impactante y demoledor. Bajo, guitarra, batería; y qué voz.

Uno de esos conciertos para recordar durante mucho, mucho tiempo.

Seguiremos informando.

Uno de junio

Escuchando: June (Spock’s Beard)

Y así, como quien no quiere la cosa, nos hemos plantado en junio. Un mes odiado por mucha gente (yo entraba en ese grupo cuando había exámenes a la vista), pero que en mi caso, y en este año concreto, tiene muy buena pinta.

Si hablamos del tiempo, la cosa promete. Incluso aquí, hace sol. A ver si este fin de semana hay alguna escapadita para oxigenarse un poco.

Si hablamos de trabajo, siguen saliendo perqueñas cosas interesantes que hacen que me plantee nuevos planes con idénticas estrategias.

Y si hablamos de todo un poco, se puede comentar que durante este mes dejaré de ser veinteañero y lo celebraré, puede que tenga alguna visita, haré un curso de fotografía, iré a un festival en calidad de -espero- fotógrafo, seguiré participando en concursos aunque no gane, se irá gestando alguna fiesta… No, no va a haber mucho tiempo para aburrirse.

Ya que hablaba de mi cumpleaños: ayer tuve mi primer regalo, anticipado, por sorpresa y traído en mano desde el mismísimo London Town. Comprado en Notting Hill, que no se diga. Ya tengo de nuevo en mis manos, por fin, y ahora en versión original, el libro que tanto buscaba. Gracias, mil gracias, qué ilusión. Esto se está conviertiendo en una costumbre, el año pasado me lo regalaron también, aunque de otra forma.

Una pena que con tanto ajetreo lleve mil horas de sueño atrasado. Y no, hoy tampoco va a ser el día para recuperarlas, porque toca concierto. Conciertazo, diría yo.

Seguiremos informando.

Informativos de noticia única

Escuchando: Se nos rompió el amor (A Palo Seko)

Mientras comía he estado viendo el telediario. Media hora, o más, no suelo comer muy rápido. En ese tiempo, una única noticia: se ha muerto Rocío Jurado. ¿No hay más noticias en el mundo? ¿Es un acontecimiento tan importante como para monopolizar el informativo, los programas mañaneros, la franja nocturna…?

Mi humilde opinión es que no. Rocío Jurado sería una artista (supongo, nunca fui fan suyo), pero el despliegue me parece excesivo, desproporcionado y fuera de lugar. Muy propio de este país, por otro lado.

Lo siento por ella, lo siento por su famila, hay enfermedades que tristemente son una putada, y una lucha constante. Pero Rocío Jurado no es la primera perona que ha tenido cáncer. Muchos ni siquiera tienen el dinero para ir a Houston a tratarse. Y desgracidamente, Rocío Jurado no es la primera persona que muere por ello ni, más desgraciadamente aún, tampoco será la última. Habrá familias que sigan pasando por ello, aunque no todas monten un circo alrededor.

Hay gente que muere de forma más discreta. A veces hasta más de cinco mil de golpe. Pero están lejos, y no cantaban como una ola.

Seguiremos informando, pero no de lo mismo.